SpaceX realizó con éxito la expulsión de emergencia de la cápsula Crew Dragon en un lanzamiento no tripulado que forma parte de las pruebas previas a los lanzamientos espaciales tripulados de la empresa.
Después de un día de retraso a causa de las condiciones climatológicas, la empresa aeroespacial de Elon Musk lanzó una cápsula Crew Dragon desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en Florida, con el fin de probar su sistema de aborto de emergencia en vuelo, diseñado para poner a salvo a la tripulación en caso de que surjan problemas con el cohete.
Watch live as SpaceX tests Crew Dragon’s in-flight launch escape capabilities https://t.co/lcfz0LS8O9
— SpaceX (@SpaceX) January 19, 2020
Alrededor de 90 segundos después del despegue, a una altitud de 19 kilómetros sobre el océano Atlántico, la cápsula encendió los propulsores Super Draco y fue expulsada lejos del cohete Falcon 9, que al poco tiempo explotó y se desintegró en el aire, como contemplaba SpaceX.
Luego, la cápsula descendió con ayuda de cuatro paracaídas y cayó en el océano en aparentes buenas condiciones. El siguiente paso de la prueba es analizar los datos de vuelo y con base en ello, se determinará si la nave puede ser utilizada para transportar astronautas.
Si los datos confirman que Crew Dragon es segura y se autoriza su vuelo tripulado, la NASA volverá a enviar astronautas sin la ayuda de un tercero, pues recordemos que desde 2011, con el cierre del programa de transbordadores espaciales, todos sus astronautas han viajado en cápsulas rusas Soyuz.
