Ateniéndonos a la definición de filtro o el mecanismo de filtrar, tenemos que esto es el hecho de dejar pasar ciertas cosas o sustancias determinadas con algún fin especial. “Se denomina filtración al proceso de separación de partículas sólidas de un líquido utilizando un material poroso, llamado filtro. La técnica consiste en verter la mezcla sólido-líquido que se quiere tratar sobre un filtro que permita el paso del líquido, pero que retenga las partículas sólidas”. Esta puede ser una buena definición, se trata de separar algo de otra cosa, aquí pudiera pensarse en discriminar algo para separarlo de un núcleo o de un todo.
En el medio de la aviación, en cualquier modalidad, el resultado o, más bien, la resultante de aplicar un buen filtro redunda en algo bueno, algo de calidad, en algo que sirve para otra cosa mejor. Pongo el ejemplo de una planta de pilotos, los filtros consistirían en los adiestramientos, en los requerimientos legales, por ejemplo. Entonces, con este ejemplo de filtros, tendremos pilotos con documentación completa y pilotos adiestrados, lo cual será de gran utilidad y se puede pensar en una planta que opere de manera segura. Si quisiéramos apretar más y filtrar con mayor asiduidad a las tripulaciones, entonces deberíamos ser más estrictos en las evaluaciones, por ejemplo. Es conveniente señalar que para filtrar el trabajo de un grupo de PTA’s (personal técnico aeronáutico) se deben primero fijar las metas, ¿qué tanto se pretende subir el nivel del grupo en conjunto? Mientras más estricto sea nuestro filtro, mayor calidad del grupo tendremos y nuestra planta de PTAs estará altamente capacitada y los niveles de seguridad se magnificarán de manera sustantiva.
Todo lo que se refiere a aviación tiene que ver con seguridad, algo a que no se le da la importancia que se debe, esto hay que reconocerlo, existe realmente mucha simulación en esto, aunque se esgrima lo contrario porque no se tiene el compromiso verdadero con anteponer la seguridad a cada una de las acciones que se realizan, claro que con muy marcadas y honrosas excepciones. Cuando se detiene uno a observar las noticias de los temas de aviación, se da uno cuenta de que difícilmente muchos de los autores involucrados reconocen que no son capaces de siquiera mencionar que no pusieron la atención adecuada en el desarrollo de sus funciones. Por desgracia, a la hora de comparar lo que se hace en otros países en materia de seguridad, sobre todo de primer mundo, en los que las cuestiones de seguridad aérea son de una relevancia alta, con nuestro país, destaca el que cada entidad “cuida” “su propia seguridad”, porque se piensa que el que se sea señalado como que se cometió algún error o se le restó importancia a algún hecho, es lo que priva.
Por ejemplo en el tema de incursiones en pista se deduce, después de llevar a cabo la investigación de rigor, que la deficiencia en el conocimiento del idioma inglés es el hallazgo que se encontró y cuando vas a revisar la documentación que avala el conocimiento de este idioma resulta que todo está correcto. A la hora de revisar la manera en que se realizan las evaluaciones del conocimiento del inglés, siguiendo este ejemplo, no se llevan a cabo estas con el rigor necesario, el resultado no refleja, pues, lo que la realidad nos está diciendo a gritos y por consiguiente no se pueden corregir los errores. En nuestro país, aunque reconozco que se han realizado esfuerzos por remontar el “síndrome del compadre”, cuando se trata de alguien conocido y más aún de un pariente, el filtro se reblandece y no se corrigen los vicios que se tienen de origen. Ay de aquel que se le ocurra señalar algo a algún PTA, porque es posible que hasta pierdas tu trabajo.
Por lo tanto, analizando lo anterior y considerando ese gran problema que tenemos derivado de nuestra idiosincrasia y la protección que “debemos” aplicar a nuestros allegados o conocidos, resulta que todo “está bien”. Pregunto, si todo está bien, entonces ¿por qué suceden los problemas o riesgos en donde no debiera haberlos? ¿No será tiempo de que alguien sensibilice a las altas direcciones y entiendan que los errores deben reportarse para descubrir el verdadero origen de las fallas? Inventamos sistemas de reportes, que si los obligatorios, que si los voluntarios, tal como lo señalan los organismos internacionales y no se hace lo necesario para mandar el mensaje claro a los actores de las actividades de aviación de que, el propósito principal, es conocer el error, “atraparlo” y corregirlo.
Por desgracia, en nuestro país, lo político sigue estando arriba de lo técnico y las decisiones que se toman están privilegiando lo primero, y esto tiene un mayor peso cuando se trata de temas de seguridad y en consecuencia el grado de peligrosidad crece de manera exponencial. Sólo bástenos poner un poco de atención en lo que sucede consuetudinariamente en México, en donde las autoridades de mayor jerarquía mandan una cierta instrucción y ésta debe ser acatada, so pena de poner en peligro tu propio empleo. Esto es un comportamiento común en los seres humanos y nadie se salva de caer en eso, si se quiere ver de manera fría, sólo que en países más avanzados que han pasado ciertos vicisitudes son mucho más estrictos los filtros.
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