El pasado 15 de noviembre nació en Bogotá el Colegio de Abogados de Derecho Aeronáutico “CADA”. Dentro de sus objetivos está el estudio, investigación, divulgación y perfeccionamiento del derecho aeronáutico, su historia, estudio normativo nacional e internacional, así como aquellos aspectos económicos, financieros, empresariales y contractuales que guarden relación con esta rama de derecho.
Dictan sus estatutos que podrá ser miembro cualquier profesional y/o tecnólogo que de alguna manera demuestre su interés en el derecho aeronáutico y sus áreas relacionadas, pues el “CADA” cuenta con varios comités, como el de asuntos aeroportuarios e infraestructura, de financiación de aeronaves y flota, asuntos regulatorios de transporte aéreo, asuntos administrativos, judiciales y legislativos, comité de asuntos académicos y publicaciones, temas medioambientales y de sostenibilidad, innovación, aviación No tripulada, de aviación privada y trabajos especiales.
En un sector tan dinámico, son innumerables los retos y oportunidades que enfrenta esta industria, pues su alto impacto en la economía de un país como Colombia es determinante; por ejemplo, en la cadena turística y su aporte al PIB, pues a la fecha ya se están superando las cifras prepandemia en relación con el tráfico de pasajeros, demostrando así la resiliencia del sector.
Otros retos como la descarbonización (emisiones cero a 2050) de la industria, medio ambiente, SAF (Sustainable Aviation Fuel), nuevas propuestas legislativas en materia de protección al consumidor, slots, infraestructura y oportunidades como la aviación no tripulada, serán objeto de estudio dentro del “CADA”, siempre con carácter propositivo en pro de esta industria.
En relación con la aviación no tripulada, el “CADA” acaba de realizar su primer conversatorio “Dron Delivery en Colombia”, el cual integró a la Autoridad Aeronáutica, la academia y la industria. Evento en el cual se compartieron las experiencias de otras jurisdicciones.
Hoy en el mundo se ha transformado la forma de hacer negocios, el dron delivery es la opción para la atención de las zonas aisladas, rápidas respuestas, reducción de emisiones y quizás lo más importante el mejoramiento de la calidad de vida de las personas, pues más allá de ser un vehículo, no es concesible que hoy en día puedan morir personas por no contar con una atención rápida en cuanto a medicamentos se refiere.
Países del primer mundo ya realizan conexiones entre hospitales y laboratorios, lo que se traduce en una oportunidad del servicio mediante el uso de autopistas automatizadas. La aviación no tripulada será durante la próxima década el sector más dinámico de la industria aeroespacial, con cifras atractivas.
La invitación hoy es a construir entre todos los actores un ambiente regulatorio óptimo para la operación de estas aeronaves en la modalidad – delivery, regulaciones inteligentes. La innovación no solo debe ser técnica sino jurídica, lo cual nos hará más competitivos en la región y por qué no, en el mundo, pues el creciente número de las operaciones a nivel mundial exigirá cambios que se adapten de una manera rápida.
Todo lo anterior, propendiendo por la integración de estas aeronaves no tripuladas en el espacio aéreo de una manera segura, así como de sus operaciones, máxima tanto de la aviación tripulada como este tipo de aviación. Como lo señalaba uno de nuestros participantes del conversatorio, la construcción de una confianza es esencial para integrar en este ecosistema estas nuevas operaciones.
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