De enero a marzo de 2018, las tres principales aerolíneas de los Estados Unidos registraron diferentes resultados operativos, aunque caracterizados por tres constantes: ingresos totales récord, incrementos moderados en utilidades netas y gastos de combustible por las nubes.
En términos de facturación total, American Airlines (AA) ingresó la friolera de 10 mil 401 millones de dólares (mdd); le siguió de cerca Delta Air Lines, con 9 mil 968 mdd, y en tercer lugar United Airlines con 9 mil 32 mdd.
Estos números representaron incrementos contra el primer trimestre de 2017 del 5.9, 10 y 7.2%, respectivamente.
Sin embargo, las ganancias netas se redujeron casi a la mitad para AA (de 340 a 186 mdd), mientras Delta tuvo una caída marginal del 2% (de 561 a 547 mdd). Por su parte, United vio sus utilidades elevarse 48.5%, aunque aún está lejos de sus rivales (de 99 a 147 mdd).
El principal factor que afectó a las compañías estadounidenses fue el incremento en los precios de combustible, pues cada aerolínea tuvo que gastar en este rubro cerca de un cuarto más de lo erogado el año anterior.
En términos netos, United fue la que gastó más en combustible, con mil 965 mdd (+26%), seguida de Delta, con mil 856 mdd (+25%), y finalmente American con mil 763 (+25.8%).
Pese a todo, la demanda de viajes sigue impulsando las decisiones y prospectos de las tres compañías, que revelan su optimismo a través de sus guías de ganancias por acción: AA prevé entre 5 y 6 dólares, Delta proyecta 1.8 a 2 dólares, y United entre 7 y 8.5 dólares.
