
Spirit Airlines solicitó a un tribunal de bancarrotas en Estados Unidos el permiso para rechazar los contratos de arrendamiento de 87 aviones de la familia A320, en lo parece una nueva acción de la empresa en su reestructuración financiera.
De acuerdo al medio The Points Guys, la petición abarca 19 A320ceo, 65 A320neo y tres A321neo.
La semana pasada la aerolínea también anunció haber acordado con la arrendadora AerCap la cancelación de contrato por 27 aviones A320neo.
En total, la empresa ha rechazado 114 aeronaves, lo que representa más de la mitad de su flota actual y el equivalente al tamaño de operadoras como Allegiant o Copa Airlines Panamá.
A finales de agosto, Spirit se arropó por segunda vez en menos de un año al Capítulo 11. Entre las acciones emprendidas por el momento destacan la cancelación de rutas, suspensión de pilotos y sobrecargos y deshacerse de aviones.
Los rechazos de arrendamiento también incluyen toda la flota de aviones A320neo de bajo consumo de Spirit, que han enfrentado problemas con los motores Pratt & Whitney de turboventilador engranado. En agosto, la aerolínea dejó en tierra 38 aeronaves con estos motores debido a fallas.
“Rechazar estos contratos de arrendamiento liberará a Spirit de la carga de arrendamientos no rentables y de los costos de mantener y almacenar varios aviones que ya están fuera de servicio”, dijo Fred Cromer, director financiero de la empresa.
El directivo estimó que los ahorros anuales ascenderían a “cientos de millones de dólares”.
En noviembre, Spirit operará casi un 19% menos de vuelos y un 16% menos de asientos que hace un año, según datos de programación de la empresa de análisis Cirium.
En caso de aprobarse todos rechazos de arrendamiento, Spirit tendrá 101 aviones para operar: 43 A320ceo, 29 A321ceo y 29 A321neo.







