El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, promulgó el decreto que aprueba el proceso de reprivatización del capital social de TAP, en la página oficial de la presidencia de dicho país.
Los interesados privados para adquirir un máximo de 44.9% de participación tienen 60 días para preclasificarse, paso tras el cual dispondrán de otros 90 días para presentar sus propuestas no vinculantes.
Lufthansa Group, Air France-KLM e IAG (International Airlines Group) han manifestado interés en convertirse en accionistas de la compañía, la cual pondrá otro 5% de participación disponible para los empleados de la misma. En total, la operadora paraestatal no se desprenderá de más del 49.9%.
A inicios del mes pasado, el primer ministro de Portugal, Luís Montenegro, aprobó un decreto de ley para la reprivatización, la cual busca que se “pueda asegurar que nuestra compañía aérea proteja el hub en Lisboa y el aprovechamiento de todas las infraestructuras aeroportuarias del país”.
Entre las infraestructuras a las que se refiere están el Aeropuerto Humberto Delgado y el de futura construcción, el Luís de Camões, en Alcochete, a unos 30 kilómetros de Lisboa, así como las terminales de Porto, Faro y de los archipiélagos de Azores y Madeira.
TAP cuenta con slots atractivos a Brasil, también Estados Unidos (desde su hub en Lisboa) y países africanos de habla portuguesa.
Ya en octubre de 2023, De Sousa vetó la venta de al menos el 51% de TAP, alegando falta de transparencia y temores sobre la capacidad del Estado para supervisar e intervenir en una empresa estratégica y tras las elecciones de mayo pasado, el nuevo gobierno se comprometió a retomar la privatización, con el objetivo de vender una participación minoritaria en TAP.