La aerolínea easyJet indicó que por primera vez en la industria se cuantificó el impacto que la ineficiencia del espacio aéreo europeo tiene en las emisiones de CO2. Este análisis busca demostrar la necesidad urgente de una reforma en la gestión del espacio aéreo europeo, aseguró que es una medida que debió implementarse hace años.
El estudio se realizó mediante la monitorización de los vuelos de easyJet durante un periodo de 12 meses, utilizando inteligencia artificial para analizar los efectos de estas ineficiencias en las operaciones de la aerolínea y de toda la región.
El estudio reveló que las ineficiencias en el espacio aéreo incrementan las emisiones de CO2 en un 10.62%, lo que se traduce en 663,710 toneladas de dióxido de carbono adicionales. Estas emisiones derivan directamente del actual sistema de gestión del espacio aéreo en Europa.
Las áreas más afectadas son las terminales, especialmente durante las maniobras de descenso, donde la infraestructura anticuada y el diseño deficiente del espacio aéreo contribuyen de manera significativa a estos problemas.
Las rutas de easyJet en el Reino Unido son las más afectadas por estas ineficiencias, destacando que siete de las diez rutas menos eficientes involucran el aeropuerto de Londres Gatwick. Esta región, en particular el sureste, enfrenta limitaciones de capacidad debido a la alta demanda, lo que genera un aumento en las emisiones.
Los expertos en eficiencia de vuelo de easyJet señalan que estas deficiencias no solo afectan a sus operaciones, sino también a las de otras aerolíneas europeas.
El reciente compromiso del gobierno británico de modernizar su espacio aéreo, tras recuperar el control completo sobre su gestión, genera expectativas de que el Reino Unido pueda convertirse en un referente en la reforma del espacio aéreo a nivel internacional. Esto podría ayudar a mitigar las ineficiencias actuales y reducir de forma significativa las emisiones de carbono en sus operaciones aéreas.
Además del Reino Unido, otros países como Italia, Francia, España y Suiza también enfrentan retos similares en la modernización de su espacio aéreo. En rutas como la que conecta Londres Gatwick con Milán Malpensa, easyJet detectó un exceso de emisiones de hasta un 19%, lo que resalta la urgencia de abordar este problema a nivel europeo.
