A pesar de las sanciones occidentales por la invasión a Ucrania en el 2022, Rusia ha logrado hacerse de piezas de repuesto de los fabricantes de aviones Boeing y Airbus por un valor aproximado de 1,100 millones de dólares (mdd), de acuerdo a una investigación del medio finlandés Yle.
El medio europeo se basó en datos aduaneros internacionales para su investigación, la cual reveló que Rusia ha logrado hacerse de estos repuestos gracias a importaciones hechas mediante terceros países como China, Turquía, Gabón o Emiratos Árabes Unidos.
Los registros muestran que se ha importado lo equivalente a 703 mdd en piezas de Airbus y 470 mdd en repuestos de Boeing. Al ser consultados, ambos fabricantes afirmaron que suspendieron los envíos a Rusia conforme a lo dictado por las sanciones.
El análisis de datos aduaneros internacionales realizado por el medio encontró que aproximadamente 4,000 envíos de piezas, entre motores y sistemas electrónicos con posible uso militar, equipos de comunicación, radares y otra tecnología, de Airbus o Boeing fueron enviados a Rusia entre febrero de 2022 y septiembre de 2024.
Más de 360 empresas en todo el mundo estuvieron involucradas en la entrega de estos envíos.
Yle sostuvo que la mayoría de las exportaciones fueron destinadas a aerolíneas civiles rusas, las cuales están incluidas en las listas de sanciones pues generan ingresos para Moscú al ser propiedad mayoritariamente estatal.
Al momento de la invasión a Ucrania, las aerolíneas rusas operaban cientos de aviones arrendados a empresas occidentales, las cuales cancelaron los contratos después de que entraran en vigor las sanciones, aunque las aerolíneas rusas no devolvieron los aviones.
The Guardian estimó que Rusia retuvo alrededor de 500 de estos aviones, valorados en casi 11,700 mdd, aunque Moscú ha negado haberse quedado con las aeronaves, alegando que la cancelación de los contratos de arrendamiento fue injustificada y que está dispuesto a pagarlos.