En los últimos años, el gobierno mexicano ha tomado medidas para transferir el control de varios aeropuertos civiles a instituciones militares. Por ejemplo, el presidente López Obrador confirmó que la Marina tomará el control completo del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Aunque la Marina ya estaba a cargo de la seguridad en el AICM, esta medida representa una transferencia completa del control del aeropuerto a una institución militar.
Esta decisión ha generado preocupación entre algunos expertos en el sector de la aviación. Rosario Avilés, experta en el sector de la aviación, señaló que las fuerzas armadas deberían centrarse en la seguridad nacional en lugar de en la gestión de aeropuertos. Según ella, sus esfuerzos están siendo distraídos por la gestión de infraestructuras y la construcción de hoteles, lo cual no es su función.
La industria aérea y luego la aeroespacial han sido un importante foco en el desarrollo económico mexicano, tanto como sector industrial como en relación con el crecimiento de la aviación comercial, privada y defensa. Todos estos factores se combinan para hacer que la aviación civil y lo aeroespacial sea una parte clave de nuestra estrategia de sector prioritario y un sector líder en perspectivas para México.
Sin embargo, aún queda por ver cómo afectará exactamente esta transferencia del control militar a los aeropuertos civiles al desarrollo y crecimiento de la industria de la aviación de pasajeros y carga en México. Es importante seguir monitoreando esta situación y evaluar su impacto en el futuro.
Posibles ventajas y desventajas de la toma de control militar de los aeropuertos civiles en México:
Ventajas:
–Seguridad: El presidente López Obrador ha afirmado que la Marina ha hecho un “muy buen trabajo” en la seguridad del AICM. Según él, ya no hay robos de maletas como ocurría antes y se toman medidas para evitar el contrabando y la entrada de drogas.
-Orden y disciplina: El director general del AICM, Carlos Velázquez Tiscareño, dijo que el aeropuerto se beneficiará del control de la Marina en una serie de aspectos. Según él, habrá “mayor seguridad, certeza, adhesión a las normas, orden y disciplina”.
Desventajas:
-Distracción de esfuerzos: Las fuerzas armadas deberían centrarse en la seguridad nacional en lugar de en la gestión de aeropuertos. Sus esfuerzos están siendo distraídos por la gestión de infraestructuras y la construcción de hoteles, lo cual no es su función.
-Impacto en el desarrollo comercial y la conectividad: Aunque aún no está claro cómo afectará exactamente esta transferencia del control militar a los aeropuertos civiles al desarrollo comercial y la conectividad en México, es posible que haya preocupaciones sobre cómo afectará a la industria de la aviación sobre todo por el tema de contar con un capital humano con la mentalidad, habilidades y creatividad que se requieren para la orientación a negocio y desarrollo económico.
Según la información en fuentes públicas, la Marina tomará el control completo del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Además, el presidente López Obrador también anunció que la Marina tomará el control de los aeropuertos en Ciudad del Carmen, Campeche; Ciudad Obregón, Sonora; y Guaymas, Sonora.
Por otro lado, el Ejército tendrá la responsabilidad del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que abrió en una ubicación al norte de la capital en marzo de 2022; el aeropuerto en Tulum, Quintana Roo, que actualmente está en construcción; y los aeropuertos en Campeche, Puebla y la ciudad fronteriza de Tamaulipas de Nuevo Laredo.
La militarización de sectores y servicios típicamente del ámbito civil puede tener tanto ventajas como desventajas desde el punto de vista del crecimiento económico. Aquí hay algunos ejemplos:
Ventajas:
-Seguridad: La presencia militar en sectores y servicios civiles puede mejorar la seguridad y reducir el riesgo de actividades ilegales, lo que puede tener un impacto positivo en el crecimiento económico.
-Estabilidad: La presencia militar también puede proporcionar estabilidad en situaciones de conflicto o disturbios civiles, lo que puede ser beneficioso para el crecimiento económico.
Desventajas:
-Costos: La militarización de sectores y servicios civiles puede ser costosa y requerir una inversión significativa en infraestructura y personal. Esto puede tener un impacto negativo en el crecimiento económico si los recursos se desvían de otras áreas importantes.
-Distorsiones del mercado: La presencia militar en sectores y servicios civiles puede distorsionar el mercado y afectar la competencia, lo que puede tener un impacto negativo en el crecimiento económico.
Y aunque es difícil decir con certeza qué tendrían que temer los concesionarios aeroportuarios privados en México ante la militarización de los aeropuertos y el anhelo militar por concesiones civiles de aeropuertos. Sin embargo, aquí hay algunas posibles preocupaciones que podrían tener:
-Competencia: La presencia militar en la gestión de aeropuertos podría representar una competencia para los concesionarios aeroportuarios privados, lo que podría afectar su rentabilidad y viabilidad a largo plazo.
-Cambios en las regulaciones: La transferencia del control de los aeropuertos a instituciones militares podría llevar a cambios en las regulaciones y políticas que afecten a los concesionarios aeroportuarios privados.
-Incertidumbre: La militarización de los aeropuertos y el anhelo militar por concesiones civiles de aeropuertos podría generar incertidumbre entre los concesionarios aeroportuarios privados sobre el futuro de sus operaciones.
Estas son solo algunas posibles preocupaciones y es importante tener en cuenta que el impacto real de la militarización de los aeropuertos, en los concesionarios aeroportuarios privados, puede variar según el contexto específico de la región del país y el aeródromo en cuestión.
Por otra parte, México fue degradado de la Categoría 1 a la Categoría 2 por la Administración Federal de Aviación (FAA) en mayo de 2021, lo que significa que el país no cumple con los estándares internacionales de seguridad en la aviación. Desde entonces, el gobierno mexicano ha estado trabajando para recuperar la Categoría 1 y ha afirmado que está determinado a hacerlo rápidamente… pero los meses pasan y no se ve la luz al final de túnel.
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