¿Eres piloto aviador? ¡Considera dejar el cigarrillo! Te explico las razones.
El humo del tabaco se compone de tóxicos variados. Un 60% son gases, entre los que destaca el monóxido de carbono CO, que bloquea el transporte oxígeno por parte de la hemoglobina en la sangre.
Los fumadores pierden parte de su capacidad de transporte de oxígeno en la sangre, por lo que los problemas de la falta de oxígeno con la altitud se pueden agravar y aparecerán antes de lo previsto.
Los cambios por CO suelen ser insidiosos y no solo reducen la cantidad de oxígeno en circulación, sino que impiden la entrega de oxígeno a los tejidos, lo que puede producir hipoxia durante un vuelo.
La nicotina, su principal alcaloide, creador de hábito y dependencia por ser sustancia activa sobre el sistema nervioso, representa del 0.4 a 3 miligramos por cigarrillo.
La brea o alquitrán, supone de 16 a 43 miligramos por cigarrillo e incluye al menos siete compuestos carcinogenéticos del tipo hidrocarburos aromáticos.
Si eres fumador, debes tratar de abandonar este hábito. Dejar de fumar es posible y puedes conseguirlo. Una vez que lo hagas, estarás a punto de iniciar un proceso que te llevará a ganar en salud y calidad de vida.
Piensa en los beneficios del abandono del tabaco y busca sus propias razones para dejarlo.
Entre los beneficios de dejar el tabaco están el incremento en la agilidad, menos cansancio, disminución o desaparición completa de la tos, recuperación de sentidos olvidados como el gusto y el olfato, recuperación del equilibrio y la hidratación de la piel y por supuesto un mayor aporte de oxígeno necesario no sólo para una operación aérea sino para la vida diaria.
