Boom Supersonic anunció el éxito del vuelo de XB-1, el primer avión supersónico del mundo desarrollado de manera independiente, en el Mojave Air & Space Port de Mojave, California.
Al igual que Overture (avión insignia en desarrollo), el XB-1 aprovecha tecnologías avanzadas para permitir un vuelo supersónico eficiente, incluyendo compuestos de fibra de carbono, aviónica avanzada, aerodinámica optimizada digitalmente y un avanzado sistema de propulsión supersónica.
“El XB-1 despegó en el mismo espacio aéreo donde el Bell X-1 rompió por primera vez la barrera del sonido en 1947. He estado esperando este vuelo desde que fundé Boom en 2014, y marca el hito más significativo hasta ahora en nuestro camino para llevar los viajes supersónicos a los pasajeros de todo el mundo”, declaró Blake Scholl, fundador y CEO de Boom Supersonic.
El avión fue pilotado por Bill “Doc” Shoemaker, piloto jefe de pruebas de Boom, mientras que Tristan Brandenburg, piloto de pruebas, pilotó el avión de persecución T-38 que monitorizó el vuelo.
Así, el XB-1 despegó del Mojave Air & Space Port y voló en el mismo espacio aéreo que ha sido testigo de muchos primeros vuelos históricos. El XB-1 alcanzó con éxito una altitud de 7,120 pies y velocidades de hasta 238 nudos (273 mph), cumpliendo todos sus objetivos de prueba.
Este primer vuelo marca el regreso de un avión supersónico civil a los cielos, dos décadas después de la retirada del Concorde, allanando el camino para el renacimiento de los viajes supersónicos convencionales.
El programa XB-1 sienta las bases para el diseño y desarrollo de Overture, priorizando la seguridad en ingeniería y fabricación. Además, valida tecnologías e innovaciones clave, como el sistema de visión de realidad aumentada, la aerodinámica optimizada digitalmente, los compuestos de fibra de carbono y las tomas supersónicas.
El sistema de visión de realidad aumentada utiliza dos cámaras montadas en el morro, aumentadas digitalmente con indicaciones de actitud y trayectoria de vuelo, alimentando una pantalla de alta resolución para el piloto, lo que permite una excelente visibilidad de la pista. La aerodinámica optimizada digitalmente, lograda mediante simulaciones de dinámica de fluidos computacional, resulta en un diseño seguro y estable en el despegue y el aterrizaje, además de eficiente a velocidades supersónicas.
El XB-1 está fabricado casi en su totalidad con materiales compuestos de fibra de carbono, lo que permite un sofisticado diseño aerodinámico en una estructura resistente y ligera. Las tomas del motor del XB-1 reducen la velocidad del aire supersónico a velocidades subsónicas, convirtiendo eficazmente la energía cinética en energía de presión, lo que permite a los motores de reacción convencionales propulsar el XB-1 desde el despegue hasta el vuelo supersónico.
