A partir de noviembre, todos los extranjeros que vuelen a Estados Unidos tendrán que estar totalmente vacunados y deberán mostrar una prueba de ello antes de abordar el avión.
Si bien esta medida permitirá la entrada de cientos de viajeros, particularmente de Europa y el Reino Unido, que no tenían permitido su entrada a este país, puede complicar los viajes de personas latinoamericanas que, hasta la fecha, no requerían de haber recibido un esquema completo contra el covid-19 para poder ingresar a este país.
Asimismo, el gobierno estadounidense continuará solicitando una prueba negativa de detección de covid-19 hecha con un máximo de 72 horas de antelación a todos los extranjeros que busquen ingresar al país.
De esta forma, a partir de noviembre habrá dos requerimientos para ingresar a los Estados Unidos: estar totalmente vacunado y contar con una prueba negativa de covid-19.
Sin embargo, el gobierno estadounidense no ha especificado si todas las vacunas disponibles contra el covid-19 serán válidas. Será tarea del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) designar que vacunas son válidas. Por ejemplo, en Estados Unidos no se ha aprobado para el uso de emergencia las vacunas Sputnik y AstraZeneca.
A través de redes sociales, el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se congratuló de la decisión del gobierno de los Estados Unidos, pues esto ayudará a impulsar los negocios y el comercio entre ambas naciones.
