Las fabricantes de aviones Boeing y Airbus avanzan hacia un acuerdo potencialmente coordinado para dividir las operaciones del proveedor Spirit AeroSystems, asumiendo las plantas necesarias para respaldar sus principales programas de aviones, dijeron fuentes a Reuters
Si tiene éxito, cualquier acuerdo que involucre a los dos gigantes aeroespaciales pondría fin al esfuerzo de 20 años de Boeing para subcontratar elementos clave de su proceso de producción mientras lidia con una crisis que estalló después de un incidente en un avión 737 MAX en enero.
Sin embargo, para que Boeing recupere el control de su cadena de suministro, tiene que lidiar con su rival Airbus, que representa aproximadamente una quinta parte de los ingresos de Spirit.
Las personas dijeron que los dos únicos grandes fabricantes de aviones comerciales del mundo están explorando cómo desenredar sus respectivos vínculos con Spirit a través de un acuerdo “marco” cuidadosamente programado.
Las tres empresas están hablando entre sí, dijo una de las personas, aunque el formato de las discusiones no está claro.
Según Reuters, es raro que Airbus y Boeing cooperen directamente excepto en cuestiones ambientales o de seguridad debido a preocupaciones antimonopolio, y no quedó claro de inmediato si se habían reunido cara a cara.
Hasta ahora, parecía que Boeing iba a comprar todo el Spirit de nuevo en una sola pieza y sólo entonces abordaría cómo vender las fábricas en todo el mundo que abastecen en gran medida a su rival europeo.
