En España, la Audiencia Provincial de Baleares anuló la cláusula que aplican algunas compañías aéreas en sus boletos para impedir que los clientes recurran a empresas especializadas en reclamaciones.
Según este apartado en las condiciones de compra de los boletos, se prohibía la cesión de los derechos del pasajero a terceras personas o empresas, casi siempre portales online, especializadas en la reclamación de indemnizaciones en casos de retrasos, cancelaciones, denegaciones de embarque o problemas con los equipajes, entre otros.
Ahora, y tras un fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea contra Ryanair, varias audiencias provinciales han dictado sentencias en las que consideran abusiva esta cláusula para los consumidores y la declaran nula de oficio.
“La condición general del contrato de transporte de la entidad sería nula de pleno derecho no ya por su carácter abusivo por haber sido impuesta a consumidores en detrimento de sus derechos, sino por carecer de causa lícita”, indicó el tribunal balear.
Es por esta razón que las aerolíneas cada vez lo tienen más difícil para esquivar el pago de indemnizaciones a los pasajeros, pues así apostaban al desgaste de los viajeros afectados.
