Aunque la demanda mundial de fuentes de energía limpias y renovables está creciendo, el desempeño de los fondos de inversión en este rubro se ha rezagado respecto del sector de la energía convencional, que está dominado por compañías de petróleo y gas, aseveró la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
Desde enero de 2022, los rendimientos totales de los fondos cotizados en bolsa (ETF) que se centran en la energía solar, eólica y otras tecnologías verdes han sido negativos, mientras que los fondos de energía tradicionales han aumentado con fuerza.
Entre las razones de esta divergencia se encuentra el aumento de los precios del petróleo, que ha impulsado la rentabilidad de la industria de los combustibles fósiles y, por tanto, su atractivo para los inversores.
Otro factor es el creciente costo de financiar nuevos proyectos de energía verde, dado el fuerte aumento de las tasas de interés observado desde que la Reserva Federal de Estados Unidos realizó el primer aumento de este ciclo en marzo de 2022.
El bajo desempeño de los fondos de energía verde ilustra que los fundamentos son los más importante determinante de las decisiones de asignación de inversiones, y que las consideraciones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) son secundarias.
El organismo expresó que a menos que las autoridades intervengan para alterar la propuesta de inversión relativa fundamental apoyando la energía renovable al menos para igualar los subsidios gubernamentales a la producción de petróleo y gas, la tan esperada reasignación de capital tendrá dificultades para materializarse.
