En convocatoria programada para las 17:00 horas de hoy, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) decidirá en Asamblea General decisoria su postura ante el conflicto abierto con Aerovías de México SA de CV, Aeroméxico, en la renovación del Contrato Colectivo de Trabajo.
En sufragio secreto y urna cerrada, se prevé que los integrantes del sindicato voten entre dos opciones: aceptar la propuesta de la empresa, de un ajuste salarial equivalente a la inflación anualizada y una renovación del clausulado de las condiciones laborales multianuales a cuatro años; o rechazar la misma y proceder al estallamiento de huelga, que comenzaría a partir del primer minuto del 3 de octubre.
Mauricio Aguilera, secretario de Prensa de ASPA, señaló que la negociación sigue bloqueada en lo relativo al llamado contrato “B”, que aplica a los pilotos que ingresaron a partir de 2010 y que implica una menor categoría salarial y condiciones laborales que el contrato “A”.
En entrevista con A21, el portavoz informó que el gremio presentó una propuesta para que la homologación se realice en los siguientes dos años.
“No se ha propuesto que el cambio sea total, sino que se haga gradual, que poco a poco los pilotos del (Contrato) B vayan pasado gradualmente al A”, explicó.
Por su parte, y en palabras de Andrés Conesa, director general de Grupo Aeroméxico, la empresa ha indicado que no está en condiciones de ofrecer ningún ajuste contractual y que, por el contrario, la amenaza de quiebra es inminente si cede a las peticiones de los pilotos.
En caso de que la Asamblea General rechace las propuestas de Aeroméxico, la delegación sindical de los pilotos notificará esta noche a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social sobre la decisión de estallar la huelga a partir del primer minuto de este miércoles.
ASPA de México estimó que la aerolínea perdería diariamente siete millones de dólares por las afectaciones de dejar en tierra a 32 mil pasajeros diarios, en caso de que los mil 93 pilotos que trabajan para Aeroméxico entren en paro.
