Hoy se cumple el décimo aniversario del accidente de un avión de la compañía Spanair, el cual sucedió poco después del despegue en el aeropuerto madrileño de Barajas, con destino a la isla Gran Canaria. Aquel día fallecieron 154 personas y 18 quedaron lesionadas.
Actualmente hay una investigación abierta en el Congreso de los Diputados, sin embargo, la causa penal fue archivada hace seis años por la Audiencia de Madrid.
Por esta razón, la Asociación de Afectados del Vuelo JK5022 de Spanair puntualizó que las víctimas no confían en que la investigación esclarezca responsabilidades, y señalaron que la justicia española les ha dado la espalda.
Por su parte, el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) mostró su apoyo y solidaridad con las víctimas del accidente ocurrido hace diez años, y también urgió a que se aclaren las interrogantes sobre el accidente, “como el motivo del fallo de la alarma de configuración errónea de despegue (TOWS, Take Off Warning System)”, la cual hubiera hecho que los pilotos abortaran el despegue antes de elevar el avión.
“El informe final sobre el accidente dejó sin responder por qué no sonó dicha alarma, dejando como únicos responsables del accidente a los dos pilotos fallecidos”, indicó Sepla.
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