Las aulas y simuladores de Aeroméxico Formación están listos para recibir a la primera generación de 60 pilotos y técnicos sobrecargos, que el 20 de agosto próximo comenzarán su capacitación como profesionales de la industria aérea nacional.
Por primera vez, la vocación de ésta área de la compañía –como centro de capacitación para sus pilotos y personal técnico aeronáutico– se transforma y asume un rol activo en la formación de profesionales con dos carreras aeronáuticas: la de piloto aviador comercial y la de técnico superior universitario como sobrecargo.
Ernesto García, director general de Aeroméxico Formación, destacó que el objetivo de abrirse al público en general es formar profesionales con las más altas calificaciones técnicas y humanas, que se reflejen en un mejor servicio para los clientes de la aerolínea y del sector.
“Buscamos generar una experiencia distinta en cuanto al servicio que brindamos como aerolínea. Tenemos el firme compromiso como empresa que no sólo capacita, sino también forma a los futuros pilotos y sobrecargos”, destacó García, y enfatizó: “queremos profesionalizar la industria”.
El ejecutivo detalló que uno de los factores que diferenciarán a sus carreras es que no buscan estadísticas de egreso, sino que los estudiantes que se matriculen sean “simplemente los mejores”.
Abundó que los pilotos comerciales que egresen lo harán con una doble formación: 1) teórica y de simuladores en México –en las propias instalaciones dela escuela y con licencias de la Dirección General de Aeronáutica Civil–; y 2) práctica en Phoenix, Arizona, bajo la instrucción de CAE, líder en entrenamiento aeronáutico.
La carrera de piloto aviador comercial tiene una duración de 18 meses y un costo de 70 mil dólares. Por su parte, la instrucción de sobrecargo, con duración también de 18 meses y un costo de 82 mil pesos, se imparte completamente en las sede de Aeroméxico Formación.
“Creemos que con tres o seis meses, que es el promedio que dura la formación en otras escuelas, es difícil. Por ello, desarrollamos un programa exprofeso para un perfil que sea más robusto, orientado a la parte del servicio, que cuente con competencias no sólo técnicas, que son muy importantes, sino que se complementen con contenidos humanísticos, sociales, lingüísticos e internacionales”, concluyó García.
