La NASA lanzó dos nanosatélites Tropics CubeSats desde el puerto espacial Rocket Lab, en la costa este de Nueva Zelanda, marcando el inicio de un proyecto de monitoreo del clima destinado a pronosticar la escala y la intensidad de las tormentas tropicales.
Los satélites de Observación de resolución temporal de la estructura de la precipitación y la intensidad de la tormenta con una constelación de satélites pequeños (Tropics por sus siglas en inglés) fueron puestos en órbita en un cohete construido por la empresa estadounidense Rocket Lab.
Se espera que estos satélites proporcionen actualizaciones sobre el desarrollo de tifones y huracanes cada hora, así como mejorar las predicciones meteorológicas.
“Proporcionar imágenes más frecuentes no sólo mejorará nuestra conciencia situacional cuando se forma un huracán, los datos proporcionarán información a los modelos que nos ayudarán a determinar cómo cambia una tormenta con el tiempo, lo que a su vez ayuda a mejorar los pronósticos de nuestros socios, como el Centro Nacional de Huracanes y el Centro Conjunto de Alerta de Tifones”, sostuvo Karen St. Germain, directora de la división de ciencias de la Tierra en la sede de la NASA, Washington.
Horas después del lanzamiento, el equipo de Tropics anunció que se había establecido con éxito el contacto con los CubeSats.
La misión TROPICS tenía la intención de tener una constelación de seis satélites; sin embargo, los dos primeros estaban programados para alcanzar la órbita en junio de 2022, pero ambos se perdieron cuando falló el lanzamiento del Astra Rocket 3.3.
Un segundo lanzamiento de Rocket Lab debería desplegar estos dos nuyevos satélites, de acuerdo con información de la NASA y de Aerotime.
