“Si cuidas a tus empleados, tus empleados cuidarán de tus clientes y tus clientes cuidaran de tus accionistas” Richard Branson CEO de Virgin Atlantic
A la respuesta física y mental del cuerpo ante una situación desafiante, amenazante o demandante se le conoce como estrés. Hablamos de un mecanismo natural de defensa que nos ayuda a reaccionar ante presiones o peligros y que es necesario observar y cuidar porque si se prolonga por mucho tiempo o resulta muy intenso, puede llegar a provocar cansancio que se acumula y, no en pocos casos, llegar hasta fatiga crónica.
En el medio aeronáutico de todo el mundo se han estado registrando un sinnúmero de incidentes, en tierra y en vuelo, algunos más importantes que otros, pero de alguna manera afectan la seguridad de las operaciones aéreas.
La mayoría de las veces se ha podido probar que esos incidentes “pequeños” se deben al cansancio de los involucrados, quienes de pronto han perdido su conciencia situacional y cometen descuidos que pueden parecer insignificantes, pero que se van acumulando y al final logran esa cadena de eventos que son la causa de verdaderos desastres.
Las condiciones de tiempos de vuelo, jornadas de servicio y descanso en los contratos laborales que los pilotos de aerolínea tienen hoy en todo el mundo, son sumamente demandantes y han sido negociados por los administradores en aras de la productividad y mayores ganancias financieras y México, desde luego, no es una excepción.
En estos días los pilotos comerciales de las líneas aéreas de nuestro país trabajan sujetos a las máximas jornadas y horas de vuelo permitidas por ley, pero vivimos una época en que la complejidad de las operaciones, el manejo de nuevas tecnologías, el increíble aumento de tráfico aéreo, los cambios constantes en husos horarios, la mala alimentación, la falta de sueño, los cambios de presión en cabina, las condiciones de tiempo tan cambiantes, entre otras causas, están provocando altos niveles de cansancio y fatiga crónica en el personal de vuelo.
No hay que olvidar que nuestros reglamentos vigentes al respecto datan de hace más de seis décadas.Hoy como nunca podemos ver una gran cantidad de pilotos incapacitados por cuestiones médicas, en su mayoría causadas por el estrés constante y el cansancio acumulado debido al exceso de las jornadas de trabajo y descansos reducidos al mínimo posible, que van mermando su sistema inmune y provocan enfermedades de todo tipo.
Debemos decir que increíblemente en muchos casos los pilotos, a través de los años, han ido aceptando estas condiciones laborales límite bajo las que hoy laboran, a cambio de obtener mayores beneficios económicos y hoy están pagando el costo.
El cansancio está trayendo como resultado consecuencias que pueden ir desde las mínimas hasta las más importantes y son estas últimas las que pueden provocar los mayores accidentes.
Se ha dicho hasta el cansancio y está probado que el factor humano es la principal causa de incidentes y accidentes aéreos en todo el mundo y una parte importante del estudio sobre este tema tiene que ver con el aspecto médico de los pilotos.
Insistimos que son los administradores quienes en aras de la productividad para lograr mayores ganancias para sus accionistas están llevando el trabajo de los pilotos aviadores a su máximo, pero también insistimos en que los pilotos lo han permitido a través de cláusulas contractuales consensuadas y firmadas por ellos mismos, cláusulas y condiciones de trabajo que hoy los están llevando a los extremos de cansancio y fatiga.
Las condiciones laborales son revisadas al menos una vez cada año entre pilotos y administradores a través de sus respectivos representantes, en el caso de los pilotos de sus sindicatos y bien harían ambas partes en revisar cada cláusula laboral bajo otra estrategia que también tome en cuenta el factor humano y no solo el aspecto económico.
Más tiempo de descanso efectivo entre vuelo y vuelo resulta ser hoy una prioridad y el aprovechamiento de ese descanso de la mejor manera, es vital para los propios pilotos.
El cansancio extremo es un factor contribuyente que provoca errores que afectan la seguridad de las operaciones y puede ser la causa no solo de incidentes sin grandes consecuencias sino de los mayores accidentes aéreos.
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