Ya lo hemos comentado en varias ocasiones y no pasa una semana sin que las malas y precipitadas decisiones del gobierno federal afecten de alguna manera a nuestra vapuleada industria aérea.
Esta vez, debido al incumplimiento de los convenios aéreos del 2015 entre México y Estados Unidos, pues el Departamento de transporte Norteamericano (DOT) toma la decisión de no recomendar el refrendo de Inmunidad antimonopolio entre Aeroméxico y Delta.
Este asunto ya ha sido amplia y claramente abordado en A21 por Rosario Avilés en su columna y no habría mucho que agregar a una información muy completa, así es que no dejen de leerla.
Aeroméxico y Delta fueron aerolíneas fundadoras del grupo Skyteam junto con Air France y Korean en junio del 2000 y el grupo actualmente integrado por 20 aerolíneas sirve a más de 450 millones de pasajeros en más de 18 mil vuelos al día y cubre 900 destinos en 168 países.
Dentro del cupo skyteam la alianza entre Aeroméxico y Delta representa entre otras cosas muchos millones de dólares en acciones y son los accionistas norteamericanos los que tienen una inversión muy importante que puede representar hasta un 49% de la aerolínea bandera de México.
También debemos recordar los beneficios económicos y sociales que estas aerolíneas aliadas aportan a sus países de origen, especialmente hablando de nuestro México dentro de una alianza tan importante, a pesar de la gran diferencia de participación.
La falta de cumplimiento con el convenio aéreo en cuanto a renovación y mejoramiento de la infraestructura del aeropuerto Benito Juárez, así como la decisión gubernamental de reducir la cantidad de vuelos por hora en este aeropuerto y mandar a operar a las líneas de carga al AIFA, entre otras, son decisiones que han impactado en el humor del gobierno de los Estados Unidos y de ahí la decisión del departamento de Transporte.
La falta de certeza que hoy tienen los inversionistas extranjeros en nuestro país está provocando todo tipo de reacciones internacionales negativas y la decisión del departamento de transporte en el tema aéreo bilateral no es más que una muestra de esto.
Seguramente Delta y Aeroméxico encontrarán la manera de impugnar la decisión del DOT y continuarán trabajando juntas en algo que ya es mucho más que una alianza, lo contrario podría ser de muy malas consecuencias principalmente para Aeroméxico y sus planes de desarrollo.
Por lo pronto en México debemos estar preparados para afrontar más ocurrencias gubernamentales que de alguna forma afectarían a nuestra aviación por lo menos hasta el próximo 2 de Junio.
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