En las últimas semanas se han registrado varias excursiones de pista de aeronaves de diferentes aerolíneas en varias partes del mundo.
Esto, por su cantidad, resulta inusual aunque siempre son las condiciones de lluvia, niebla, nieve, baja visibilidad las que provocan este tipo de incidentes.
Hasta hoy, en este año no se han registrado pérdidas de vidas humanas por algún avión que ha “patinado” sobre la pista y ha terminado fuera de ella aunque ha habido incidentes importantes que han costado grandes pérdidas de equipo de vuelo.
Este tipo de situaciones desde luego no son nuevas pero ahora existen elementos adicionales que provocan incidentes durante operaciones en tierra por todo el mundo.
Dependiendo del tipo de material con que una pista de aterrizaje ha sido construida, de acuerdo a estándares internacionales esta debe estar sujeta a un programa periódico de limpieza con el objeto de remover , especialmente de las cabeceras todo el hule que dejan las llantas de el tren de aterrizaje de los aviones que se acumula durante miles de despegues y aterrizajes con el paso de los meses.
Las pistas ‘contaminadas’ con hule se convierten en verdaderas pistas de patinaje para los aviones de cualquier tipo peso y tamaño y aunque existen técnicas con las que se instruye en simuladores a los pilotos para disminuir el problema los incidentes y accidentes siguen sucediendo.
Los pilotos utilizan diferentes niveles de enfrentamiento automático instalados en muchos de los modernos aviones además de contar con sistemas de reversa de los motores pero a pesar de la más alta tecnología con que se diseñan estos sistemas el problema persiste.
Un piloto que está a punto de aterrizar en condiciones de pista contaminada siempre pregunta (o debería preguntar) al controlador de torre cual es el índice o calidad de frenado sobre la pista en la que va a realizar la operación, el cual que puede ser bueno, pobre o nulo con el objeto de tener una buena idea de lo que le espera después del toque del tren de aterrizaje sobre la pista.
Como están las cosas podríamos tener la impresión de que algunos pilotos caen en la complacencia y no aceptan que las condiciones de la pista contaminada con agua o nieve podrían poner en peligro su aeronave aunque todos saben bien que una vez que el avión empieza a “patinar” sobre la superficie es muy poco lo que se puede hacer para controlarlo, mantenerlo y frenarlo al centro de la pista antes de que esta se termine.
En el pasado, en la red de aeropuertos de México se mantenía un programa de limpieza de hule sobre las de pistas a cargo de Aeropuertos y Servicios Auxiliares que resultó ser muy efectivo pero desde hace años no se tiene ninguna información oficial al respecto y no sabemos si se mantiene el proceso de limpieza en la red de aeropuertos nacionales como sabemos que sí se hace en muchas partes del mundo.
También hay que decir que el riesgo existe también en pistas secas pero que no han sido limpiadas del hule de las llantas acumulado por años y que en operaciones con altas temperaturas también representan un riesgo importante debido al aflojamiento de las capas de caucho pegado a la superficie.
Como sea, hoy más que nunca el piloto profesional debe estar muy consciente, además de muy bien entrenado sobre este tema y no aceptar presiones de pasajeros o de administraciones para realizar un aterrizaje en pista contaminada más allá de lo que puede resultar seguro.
Como consecuencia de su trabajo un piloto puede estar aterrizando hoy en un aeropuerto con pista seca y temperatura normal, otro día en uno con pista contaminada por nieve o agua y con temperaturas bajo cero y estar sujeto a todo tipo de condiciones meteorológicas que no pocas veces resultan ser un verdadero reto.
De ahí la importancia de tener información verdadera y actualizada sobre las condiciones de pista antes de cada aterrizaje y aplicar un criterio basado 100% en la seguridad de la operación.
Se ha determinado, después de investigaciones sobre este tipo de incidentes, que si bien las condiciones de pista han sido factor contribuyente a incidentes y accidentes de aeronaves que terminan fuera de la pista debido a contaminación, después del aterrizaje también se ha considerado el error humano como consecuencia de decisiones equivocadas desde las cabinas de vuelo.
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