Turbulencias
Poco a poco, la experiencia nos ha enseñado que debemos tenerle respeto a la atmósfera, que no somos parte de ella y somos extraños invadiéndola todos los días, por lo que debemos conocerla y aprender a respetarla. Hace muchos años, cuando empecé a volar, nadie te decía que permanecieras con el cinturón de seguridad abrochado y sí te soltaban la letanía de seguridad, aunque era más por obligación que por convicción.