
Brussels Airport, operador del Aeropuerto de Bruselas, Bélgica, inauguró el Brucargo Central, un nuevo complejo logístico de 83,500 m2, equivalente a 12 campos de fútbol, ubicado en el corazón de su zona de carga. El proyecto reemplazó ocho edificios obsoletos por tres nuevas construcciones innovadoras que suman 34,000 m2 de almacenes y oficinas.
Esta intervención de gran escala redefine los estándares logísticos aeroportuarios en términos de sostenibilidad, innovación y rendimiento operativo, incrementando en un 30% la capacidad de almacenamiento, reduciendo un 20% las superficies pavimentadas para dar paso a más áreas verdes, y mejorando la movilidad dentro del sitio. Iniciado en 2022, el proyecto implicó una inversión total de 70 millones de euros (mde).
Con 733,000 toneladas de carga transportadas en 2024 —lo que representa un crecimiento medio anual del 6% desde 2019—, Brussels Airport consolida su posición como centro logístico clave en Bélgica y como el principal hub farmacéutico de Europa.
Para sostener este crecimiento y atender las necesidades de más de 100 empresas que operan en la zona de carga, el aeropuerto ha venido invirtiendo en infraestructura moderna, flexible y sostenible. Tras desarrollos como el Animal Care & Inspection Centre (2020), Brucargo West, y la nave para Herfurth Logistics, la inauguración de Brucargo Central marca un nuevo hito en esta estrategia.
“Acelerar el desarrollo del área de carga en el Aeropuerto de Bruselas es una de nuestras prioridades estratégicas. Nuestro papel es ser un socio confiable que ofrezca el espacio, la flexibilidad y la perspectiva a largo plazo que los operadores logísticos necesitan para prosperar en un mercado en constante evolución. Brucargo Central es una clara muestra de ello”, afirmó Arnaud Feist, director general de Brussels Airport.
Aumenta 30% la capacidad de almacenamiento y se incorporan 10,000 m² adicionales de espacio refrigerado
Con la construcción de Brucargo Central, los antiguos edificios de los años ochenta fueron sustituidos por tres edificaciones de última generación que integran almacenes y oficinas. Tras tres años de obras, el proyecto ahora ofrece 34,200 m2 de espacio de almacenamiento, lo que representa un 30% más de capacidad en la misma superficie de 83,500 m2. Además, se sumaron 10,000 m2 de espacio con temperatura controlada, elevando a 45,000 m2 la capacidad total de almacenamiento refrigerado en el área de carga del aeropuerto.
Esta ampliación permitirá atender de forma más eficiente los requerimientos específicos de sectores sensibles como el farmacéutico, la industria alimentaria y el comercio electrónico, al tiempo que se garantiza una operación más fluida y eficaz.
Establece Brucargo Central un nuevo estándar en sostenibilidad
El proyecto encarna una visión sostenible y circular: los antiguos edificios fueron desmantelados bajo principios de economía circular, y las nuevas estructuras utilizaron madera, reduciendo en 1.5 toneladas las emisiones de CO2 en comparación con edificaciones equivalentes en hormigón o acero.
Todas las instalaciones cuentan con la certificación BREEAM-Excellent, que avala el uso de materiales sostenibles y tecnologías innovadoras. Entre las soluciones implementadas se incluyen paneles solares, bombas de calor eléctricas con almacenamiento geotérmico (BEO), gestión optimizada del agua, mejora de la calidad del aire interior y abundante luz natural.
El resultado es un sitio completamente libre de combustibles fósiles y altamente eficiente en términos energéticos. Además, se destinó un 20% más de superficie a áreas verdes, mejorando tanto la sostenibilidad como el entorno laboral.
“Como en todos los proyectos de Brussels Airport, la sostenibilidad está en el centro de Brucargo Central, desde su diseño hasta su finalización. Este desarrollo es una muestra concreta de nuestro compromiso con acelerar la transición sostenible del área de carga y alcanzar nuestra meta de cero emisiones netas para 2030”, añadió Feist.
El diseño de Brucargo Central también incorpora mejoras sustanciales en movilidad y seguridad. Un estacionamiento de varios niveles con capacidad para 500 automóviles y 21 espacios adicionales para camiones optimiza el acceso tanto para el personal como para los transportistas. El sitio también incluye estaciones de carga para vehículos eléctricos como parte del impulso hacia una transición energética.
La circulación interna fue rediseñada para ofrecer mayor fluidez y seguridad, con sentido único de tránsito alrededor del complejo y una conexión Norte-Sur que permite el desplazamiento eficiente de automóviles y camiones entre los edificios. Asimismo, se construyeron rutas peatonales y ciclovías para fomentar el transporte activo y un entorno laboral más agradable.







