A pesar de los recursos que el Gobierno anunció para la primera fase de remodelación de la Terminal 1 (T1) del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), está claro que “no se les otorgan los recursos suficientes para su debido mantenimiento y modernización”, alertó Pablo Casas Lías, director del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico-Aeronáuticas (INIJA).
El abogado especialista en temas de aviación explicó que en esencia, lo anunciado este miércoles por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo fue la renovación de las salas 29 a 36 para vuelos internacionales de la T1.
Indicó que la autoridad informó que dichas obras significaron un avance de 10% del total de la remodelación a la que será sometido el aeropuerto.
El costo de los trabajos realizados, según las autoridades aeroportuarias, fue de 55.24 millones de pesos (mdp) provenientes de ingresos autogenerados, pero la labor del cuerpo directivo del AICM, dijo, es que a pesar de dirigir el aeropuerto columna vertebral del Sistema Aeroportuario Metropolitano (SAM), no se les otorgan los recursos suficientes para su debido mantenimiento y modernización.
“Por el contrario, oficialmente, se ahorca al aeropuerto con el afán de llevar tráfico de carga y pasajeros al fracasado AIFA, circunstancia que, indiscutiblemente, impacta sus ingresos”, aseveró Casas Lías.
Este miércoles, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que se puso en operación el Módulo XI del AICM.
Lo que significó la primera etapa del programa de remodelación que concluirá el siguiente año y cuyo propósito es contar con espacios más seguros, cómodos, modernos y eficientes que mejoren la experiencia de las personas pasajeras.
El objetivo de la remodelación es garantizar la seguridad de las operaciones y mejorar significativamente la experiencia de los pasajeros, proporcionando una imagen moderna y una identidad renovada al aeropuerto.
Los trabajos en esta zona abarcaron la sala de última espera de las puertas 29 a la 36 para vuelos internacionales, el pasillo de acceso a esta, así como los de separación de flujo de llegadas y su vestíbulo de ascenso y descenso de autobuses que transportan pasajeros a posiciones remotas.
La ejecución de las obras transcurrió sin afectar los aterrizajes ni despegues de aeronaves, optimizando el uso de las posiciones disponibles de la T1, detalló la dependencia.
Precisó que continúan los trabajos en sala de pre espera Bravo, también en T1, mientras que en la T2 sigue su curso la remodelación del pasillo que conecta las salas de última espera nacionales con las internacionales y del punto de inspección de pasajeros M, la renovación y pulido de pisos, y el mantenimiento de núcleos sanitarios, así como la rehabilitación de las fachadas de los dos edificios terminales.
Prefieren malgastar el dinero
El director del INIJA explicó que el actual Gobierno, prefiere “malgastar más de 45 mil mdp en una aerolínea estatal que solo genera dependencia presupuestal, que invertir en el ruinoso AICM que genera divisas, conectividad, turismo, empleos, aporta al PIB, entre otras bondades”.
El abogado especialista en temas aeronáuticos dijo que se crean comisiones burocráticas para determinar los trabajos requeridos para evitar inundaciones, cuando se sabe que lo que requiere el aeropuerto es “inversión”.
Mencionó que para el año 2024 se le asignaron, del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), mil 500 mdp y para este año, 500 mdp.
Indicó que conforme lo señalado en las notas de los estados Financieros al 30 de junio de 2025 y al 31 de diciembre de 2024, el AICM, durante el periodo de enero a junio 2025, facturó ingresos por 12 mil 707 millones 419 mil 112 pesos; mientras que entre gastos y pérdidas sumó 11 mil 537 millones 855 mil 932 pesos.