La Terminal 2 del Aeropuerto Internacional Yantai Penglai encabeza la lista de las seis centrales aéreas más bellas del 2025 seleccionadas por los premios Prix Versailles, mismas que se encuentran en países como China, Japón, Estados Unidos y Francia.
El resto del listado lo componen la Terminal 1 del Aeropuerto de Marsella-Provenza y la Terminal de llegadas del Aeropuerto Roland Garros, ambos en Francia; la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de Kansai, en Japón; la Terminal principal del Aeropuerto Internacional de Portland y la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de San Francisco, estos últimos dos en Estados Unidos.
Si bien la terminal de Yantai Penglai aparece en el primer lugar del listado, no se especifica si este corresponde al número uno entre la media docena.
“Con una superficie de 167,000 metros cuadrados, la arquitectura de la nueva Terminal 2 del aeropuerto rinde homenaje al singular paisaje costero de Yantai. Aedas (firma de arquitectura), en colaboración con CSWADI y el Instituto de Diseño e Investigación de Aeropuertos de la Nueva Era de Shanghái, se inspiró en la majestuosa montaña Kunyu para diseñar una línea de techo fluida y formas onduladas que transmiten dinamismo y armonía”, se puede leer en la descripción presentada por Prix Versailles.
El año pasado el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) fue seleccionado entre las terminales más bellas y el reconocimiento fue entonces recibido por el General Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros “Felipe Ángeles”.De los ganadores actuales, tres recibirán también el reconocimiento a lo mejor del diseño interior o exterior que se otorgará en diciembre.
“La marca que dejan los aeropuertos proviene principalmente de su papel cada vez más importante en los intercambios internacionales. Como resultado, esta infraestructura debe resolver enormes desafíos en términos de gestión de flujos y de las aeronaves mismas. “Pero esta nueva generación de instalaciones también puede considerarse como obras de arte, o al menos como elementos de belleza. De hecho, deberíamos esforzarnos por lograrlo, dado su carácter inevitable en nuestros entornos construidos y paisajes”, expresó el secretario general del Prix Versailles, Jérôme Gouadain.