El Aeropuerto Internacional Reina Alia, en Jordania, comenzó a operar una nueva planta solar que fortalecerá su estrategia ambiental y energética de largo plazo. El proyecto, desarrollado por la empresa Shams al Mattar Lil-Taqa, se extiende sobre una superficie de 65,000 metros cuadrados y tendrá una capacidad instalada de 4.8 megavatios de corriente alterna.
Con una producción estimada superior a los 10.5 gigavatios-hora anuales, la planta aportará alrededor del 25% de la energía requerida para las operaciones del aeropuerto. Esta generación eléctrica, además de reducir el uso de fuentes convencionales, evitará la emisión de unas 6,000 toneladas de dióxido de carbono al año, lo que equivale al consumo energético de más de 3,000 viviendas.
La construcción de la planta no afectó las operaciones del aeropuerto y se alineó con las políticas nacionales de expansión de energías renovables.
Este paso se suma a otros esfuerzos implementados por Airport International Group para cumplir con su objetivo de alcanzar cero emisiones netas en 2050. Las acciones incluyen también programas de control de calidad del aire, monitoreo de ruido y eficiencia operativa en las instalaciones aeroportuarias.