
High Lander y Starling iniciaron una colaboración tecnológica y comercial con el fin de integrar capacidades de gestión del tráfico aéreo no tripulado y soluciones para aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL).
Ambas compañías buscan fortalecer su posición en un mercado que crece por la expansión de operaciones autónomas y de largo alcance con drones en diversos sectores.
El memorando de entendimiento establece la integración de las capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento de las aeronaves y muelles de Starling con la escalabilidad y el soporte normativo de las soluciones de software de High Lander.
El objetivo es conformar un paquete integral para operaciones Más Allá de la Línea Visual (BVLOS) en escenarios complejos, un tipo de operación que diversos organismos reguladores promueven bajo nuevos marcos de cumplimiento.
La iniciativa considera aplicaciones en actividades comerciales y estratégicas. Estas incluyen inspección y mantenimiento de infraestructura, apoyo a cuerpos de seguridad, búsqueda y rescate, así como tareas relacionadas con la seguridad nacional.
La combinación de hardware especializado con software independiente del fabricante busca aumentar la capacidad operativa de autoridades y empresas.
Las compañías también evaluarán oportunidades en mercados internacionales, con énfasis en Estados Unidos. La colaboración se alinea con el nuevo marco de la FAA para operaciones más allá del alcance visual, que exige supervisión del espacio aéreo, redundancia operacional y capacidad de respuesta frente a riesgos en el entorno aéreo.
El acuerdo contempla la integración del VTOL Pathfinder-X y la estación de acoplamiento Starling Hub con el sistema operativo Orion DFM y la solución de gestión del espacio aéreo Vega UTM. Esta combinación permitirá gestionar flotas de drones y supervisar rutas en tiempo real desde un solo sistema.
El Pathfinder-X es una aeronave que alcanza 160 km/h, mantiene más de 2.5 horas de autonomía por carga, incorpora cámara EO-IR para misiones diurnas y nocturnas y opera con un procesador de IA a bordo. Su estación de acoplamiento, Starling Hub, ejecuta reemplazos automáticos de batería en lapsos cortos, funciona como punto de vigilancia permanente y mantiene diagnósticos integrados para evaluar el estado del sistema.
Orion DFM de High Lander operará como centro de control C2 para flotas de cualquier tamaño y distancia. La plataforma permitirá control en tiempo real, automatización de misiones y análisis de datos. Vega UTM supervisará las operaciones con información del espacio aéreo, gestión del cumplimiento normativo, resolución de conflictos y autorizaciones de vuelo bajo los estándares de la Parte 146 de la FAA.
Alon Abelson, director ejecutivo y fundador de High Lander Aviation, afirmó que esta colaboración impulsa el concepto de dron en una caja hacia un nivel superior y evidencia la ventaja de un enfoque basado en integración independiente del hardware.
“Al combinar el mejor hardware de su clase de Starling con un sistema operativo avanzado y escalable y un soporte normativo completo, estamos proporcionando un cambio revolucionario para las organizaciones que desean llevar a cabo operaciones profundas y de largo alcance a gran escala bajo un único sistema C2”, afirmó Abelson.







