Thales anunció que, en asociación con la aerolínea Amelia y la empresa Breakthrough Energy Contrails, ha dado un paso importante para tener una aviación más ecológica, mediante la implementación de una solución para evitar las estelas de condensación.
A través de una videoconferencia, Adrien Chabot, director de Desarrollo Sostenible de Amelia, dijo que la presencia de las estelas de condensación permite analizar el impacto climático de sus operaciones.
Los panelistas explicaron que las estelas de condensación, formadas por el vapor de agua generado por los aviones, atrapan el calor del sol, desempeñando un papel similar al de los gases de efecto invernadero y contribuyendo de manera significativa al calentamiento global.
Por ello, dijo, el desafío es reducir de manera significativa y rápida este impacto en el cambio climático, “continuando el despliegue de la solución Thales iniciada en 2022. Hoy, probablemente sea uno de los enfoques más prometedores en términos de costo-beneficio respecto al impacto climático”.
Y es que esta solución, accesible y de fácil implementación, abre nuevas oportunidades para todas las aerolíneas, allanando el camino hacia una aviación más sostenible y responsable a nivel global, expresó.
Desde junio de 2024, la solución de Thales para evitar las estelas, se ha implementado en todos los vuelos París-Valladolid operados por Amelia, utilizando aviones Embraer ERJ145, esto como una iniciativa que forma parte del proyecto DECOR, apoyado por el plan de inversiones 2030 de Francia.
Cabe señalar que el impacto de las estelas puede representar una parte importante de la huella climática total de la aviación, rivalizando incluso con el del dióxido de carbono (CO2).
Al integrar su solución con las herramientas del Centro de Control Operacional (OCC) de Amelia, Thales permite que los agentes de operaciones del OCC obtengan directamente rutas alternativas a sus planes de vuelo, combinando un impacto operativo controlado con una reducción significativa de las estelas de condensación.
Cuando se detecta un efecto significativo de las estelas de condensación, la solución de Thales, Flights Footprint, sugiere alternativas de vuelo que permiten una reducción considerable del impacto ambiental, con una disminución promedio mínima de hasta 40% en la huella climática total del vuelo. Esta optimización de vuelos se basa exclusivamente en ajustes a la altitud de la aeronave, sin modificar su ruta, lo que ayuda a mantener el consumo adicional de combustible por debajo de 3%.
Yannick Assouad, vicepresidente Ejecutivo de Aviónica de Thales expresó que la solución para evitar las estelas es una primicia en Francia, ya que está completamente alineada con la estrategia de la compañía, que tiene como objetivo transformar la industria aeroespacial hacia un futuro más ecológico mediante la tecnología, para lograr una aviación más sostenible y responsable.
Basada en principios científicos probados, esta solución innovadora utiliza los últimos pronósticos meteorológicos y los modelos climáticos más avanzados proporcionados por Breakthrough Energy Contrails para optimizar el plan de vuelo, comentó.
Y al final de cada vuelo, estos modelos climáticos, enriquecidos con datos de reanálisis meteorológico, se aplican a la trayectoria real del avión para evaluar la efectividad de evitar las áreas de formación de estelas, añadió.
Además, la instalación de una cámara en tierra, suministrada por Reuniwatt, permite validar la efectividad de la solución mediante la observación directa de las estelas, gracias a los análisis realizados en colaboración con la empresa de servicios digitales SII.
Este proyecto ha eliminado un promedio de más de 4 toneladas de CO2 equivalente (CO2eq) por vuelo, dijo.
Por su parte, Amelia ha decidido extender este sistema a los vuelos que cumplen con los requisitos en 2025, con lo cual se ha convertido en la primera aerolínea en implementar de manera sistemática un enfoque de evitación de estelas.
Por su parte, Matteo Mirolo, jefe de Estrategia de Breakthrough Energy Contrails expresó que el impacto de las estelas de condensación en el clima similar al del CO2, “es uno de los principales desafíos de la transición ecológica en la aviación; estamos encantados de colaborar con Thales para implementar campañas piloto para evitar, a gran escala, la formación de estas estelas”.
