El director general de Lufthansa, Carsten Spohr, dijo que los problemas de Boeing este año han sido “extremadamente molestos”, sin embargo, aseguró que sigue confiando en que el fabricante de aviones se recuperará.
En una entrevista con el Neue Zuercher Zeitung de Suiza, el director del Grupo comentó sobre las fallas de Boeing luego del desprendimiento de la puerta-tapón en el avión de Alaska Airlines y las ramificaciones posteriores que han visto caer la producción de aviones.
“Esto es extremadamente molesto y nos cuesta muchísimo dinero. Sin embargo, estoy seguro de que Boeing controlará los problemas. La industria necesita dos proveedores fuertes. Todo el mundo tiene interés en que Boeing pueda volver a construir pronto grandes aviones de forma más fiable”, afirmó Spohr.
Cuando se le preguntó si entendía por qué algunos pasajeros optaban por no volar en aviones Boeing, Spohr descartó la idea y reiteró el historial de seguridad de la industria de la aviación.
“Cada día, 30,000 aviones despegan alrededor del mundo, varias veces. Aproximadamente la mitad de ellos fueron construidos por Boeing. Nuestra industria ofrece con diferencia los más altos estándares de seguridad en comparación con otros medios de transporte”, explicó Spohr.
Añadió que cada avión construido para Lufthansa, ya sea Boeing o Airbus, es supervisado durante la producción para garantizar que cumpla con los estándares de la aerolínea.
Si bien se ha hablado mucho de que los fabricantes de aviones chinos entren al mercado, el jefe de Lufthansa descartó que la aerolínea compre aviones construidos en China al menos durante los próximos años.
“Teniendo en cuenta los estándares de seguridad que establecemos en el Grupo Lufthansa, no creo que sea realista”, afirmó.
Según Spohr, Lufthansa recibe un nuevo avión cada 10 días, incluido un nuevo avión de larga distancia cada mes.
