La tarde-noche del 13 de diciembre, un ATR-42 de la aerolínea canadiense West Wind Aviation se desplomó en la comunidad de Fond-du-Lac, provincia de Saskatchewan. Según reportes de la Policía Montada del Canadá, los 25 pasajeros a bordo fueron rescatados con vida.
De acuerdo con el sitio GlobalNews, el turbohélice se estrelló a menos de un kilómetro de la pista del aeropuerto de Fond-du-Lac. Destacó además que no se registraron explosiones luego de que el avión tocó tierra.
Una vez que la policía y las autoridades aeroportuarias fueron alertadas sobre el suceso, una brigada local de rescatistas acudió rápidamente al sitio para auxiliar a los ocupantes del avión siniestrado.
Asimismo, la Fuerza Aérea Real canadiense despachó un C-130 Hércules y un helicóptero para asistir en los esfuerzos de salvamento.
Dos pasajeros sufrieron heridas graves y tuvieron que ser trasladados mediante ambulancia aérea. También se informó que, al ser rescatados, la mayoría de los ocupantes estaban empapados de turbosina.
Al respecto, Marc Garneau, ministro canadiense de Transporte, agradeció a los equipos de primera respuesta por su rápida intervención que evitó pérdidas mortales.
“La seguridad es la máxima prioridad en Canadá. Seguiremos trabajando con la Junta de Seguridad de Transporte (TSB por sus siglas en inglés) para mantener y mejorar la seguridad del sector aéreo canadiense”, comentó.
Finalmente, la TSB de Canadá despachó ayer jueves un equipo de expertos a Fond-du-Lac para comenzar las investigaciones sobre el percance.
