
El Grupo Lufthansa anunció la expansión de su programa corporativo de eficiencia en consumo de combustible, OPS Sustainability, con nuevas medidas orientadas a reducir aún más las emisiones y mejorar la sostenibilidad de sus operaciones aéreas.
Desde su lanzamiento en 2022, el programa ha implementado más de 90 acciones específicas que han permitido ahorrar alrededor de 54,000 toneladas métricas de queroseno, evitando de forma permanente cerca de 170,000 toneladas de emisiones de CO2, equivalentes al consumo de combustible de 640 vuelos redondos entre Múnich y Nueva York con un Airbus A350-900.
En esta nueva fase, el Grupo se ha propuesto evitar aproximadamente 50,000 toneladas adicionales de CO2 por año hacia finales de 2028, lo que representa un ahorro de más de 15,200 toneladas métricas de combustible anuales. Para lograrlo, se desplegarán herramientas digitales avanzadas y modelos de decisión basados en datos que permitirán optimizar aún más la operación diaria.
“Integrar la sostenibilidad allí donde tiene el mayor impacto inmediato —en las operaciones diarias de nuestras aerolíneas— es clave”, afirmó Grazia Vittadini, directora de tecnología del Grupo Lufthansa.
“Nuestro programa OPS Sustainability ya está generando beneficios medibles en eficiencia y medio ambiente. Al mismo tiempo, estamos invirtiendo más que nunca en aeronaves de última generación con alta eficiencia en consumo de combustible”, agregó.
La nueva fase del programa contempla medidas que adoptan un enfoque práctico y basado en datos para elevar la eficiencia operacional. Entre estas se incluyen aplicaciones digitales que permiten calcular con mayor precisión el combustible necesario para cada vuelo, utilizando datos históricos de consumo.
También se integran mejoras en los procedimientos de rodaje y aproximación, cargas de agua ajustadas a la demanda, y una planificación de vuelo más precisa.
La sostenibilidad está siendo integrada de manera transversal en toda la cadena de formación de personal, tanto en cabina como en tierra, con el objetivo de fomentar decisiones conscientes que contribuyan a operaciones más eficientes de forma cotidiana.
Además, innovaciones como la tecnología de superficie AeroShark —desarrollada por Lufthansa Technik en colaboración con BASF— ya se han implementado en más de 20 aeronaves del Grupo. Esta película adhesiva biomimética imita la piel de tiburón, reduciendo la resistencia aerodinámica y, con ello, el consumo de combustible y las emisiones de CO2 en aproximadamente un 1% por vuelo.
La mejora continua de la eficiencia operativa es uno de los cinco pilares de la estrategia climática del Grupo Lufthansa, junto con la modernización de flota, el uso de Combustibles Sostenibles de Aviación (SAF), opciones sostenibles para pasajeros particulares y clientes corporativos, y la expansión de modelos intermodales de transporte.
Adicionalmente, el Grupo mantiene desde hace más de 30 años una participación activa en proyectos globales de investigación climática y meteorológica, reafirmando su compromiso con la sostenibilidad en el largo plazo.







