Ryanair cuestionó si el gobierno del primer ministro de Irlanda, Micheál Martin, puede realmente ser confiable para cumplir con las promesas de desarrollo de infraestructura en el país.
Indicó que su programa de gobierno publicado en enero prometía abolir el límite de tráfico en el Aeropuerto de Dublín “lo antes posible”, pero siete meses después, y con la cámara baja del Parlamento entrando en receso por tres meses, ni el ministro de Transporte Darragh O’Brien ni el Taoiseach Micheál Martin han tomado acción alguna.
“El Aeropuerto de Dublín y sus aerolíneas ya han construido y financiado una segunda pista, pero seguimos sin poder utilizarla porque el gobierno ha fracasado en eliminar el límite de tráfico de 2007. A siete meses del inicio de esta administración, no solo no se ha eliminado el límite ‘lo antes posible’, sino que la semana pasada An Coimisiún Pleanála impuso un segundo límite de ‘movimientos’, restringiendo aún más el crecimiento del aeropuerto a los 36 millones de pasajeros actuales”, aseveró Michael O’Leary, CEO de Ryanair.
“El Aeropuerto de Dublín ahora tiene no uno, sino dos ‘límites absurdos’, mientras el gobierno incumple su promesa de eliminar el tope”, añadió.
Las aerolíneas de Dublín apelaron este límite ilegal ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que ha suspendido temporalmente el tope de 32 millones de pasajeros. Gracias a ello, el aeropuerto crecerá por encima de los 36 millones de pasajeros. Sin embargo, la semana pasada el Consejo del Condado de Fingal y An Bord Pleanála impusieron un segundo límite, restringiendo los movimientos nocturnos a 35,600 vuelos anuales, casi el volumen actual.
Este nuevo límite es arbitrario y contradice la aprobación de 2016 que An Bord Pleanála (Consejo de Planificación) dio para la segunda pista, diseñada para aumentar la capacidad del aeropuerto a 60 millones de pasajeros.
A pesar de ello, tanto Fingal Co. como An Coimisiún Pleanála (anteriormente An Bord Pleanála) parecen buscar nuevas formas de frenar el crecimiento del aeropuerto para complacer a un reducido grupo de residentes locales (“nimbies”) cercanos al aeropuerto.
La aerolínea irlandesa adicionalmente citó varios proyectos mal gestionados recientemente, entre ellos más de 330,000 euros desperdiciados en un cobertizo para bicicletas en el Dáil Éireann (Parlamento); más de 1.4 millones de euros (mde) malgastados en una caseta de seguridad en el Departamento de Finanzas y más de 2,240 mde (y en aumento) invertidos en un Hospital Infantil cuyo costo original era de 800 mde.
“La solución es clara: eliminar estos límites ilegales en el Aeropuerto de Dublín y acelerar la entrega de infraestructura de bajo costo, en lugar de seguir malgastando dinero en cobertizos para bicicletas sobrevalorados, casetas de seguridad innecesarias o en el lamentable fracaso de entregar un hospital infantil a tiempo y dentro del presupuesto”, concluyó el directivo.