Grupo Aeroméxico no ha iniciado, ni ha tomado la decisión de iniciar un procedimiento de reestructura a través del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos, informó la compañía en un comunicado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
“En este momento estamos identificando fuentes adicionales de financiamiento para fortalecer los flujos operativos” apuntó la compañía. Esto luego de que medios nacionales e internacionales publicaran que la compañía buscaría acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras en Estados Unidos el día de hoy.
“Analizamos también distintas alternativas para alcanzar en forma exitosa, en el corto y mediano plazo, una reestructura ordenada de compromisos financieros, sin tener afectación ni disrupción en las operaciones”, indicó la aerolínea.
Al respecto, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) aseguró que están trabajando ante cualquier escenario posible de cara a la renegociación del convenio de colaboración entre los pilotos y Aeroméxico, mismo que vence el 2 de julio.
“Nosotros tenemos varios escenarios planteados y estamos preparados para cualquiera. Nuestro principal objetivo en estas circunstancias es preservar las fuentes de empleo. La recuperación de la industria es postiva pero más lenta de lo que se esperaba”, aseguró José Suárez, secretario de Prensa y Publicidad del sindicato.
Por su parte, la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA) señaló que entienden la existencia de medidas efectivas para la reestructura de deudas en Grupo Aeroméxico luego de la crisis provocada por la pandemia. “ASSA de México es una organización cuyo objetivo ha sido la protección de los derechos adquiridos de nuestros agremiados. Expresamos nuestra confianza y apoyo a Grupo Aeroméxico. Los sobrecargos estamos listos para enfrentar todos los escenarios en unidad”, informó Ricardo del Valle, secretario general del sindicato.
La aerolínea ha registrado una caída importante en su demanda derivado de la actual pandemia de covid-19, aunque desde los años previos ya había presentado resultados financieros poco favorables.
“A Grupo Aeroméxico le ha sido muy difícil competir en el mercado doméstico porque tiene una estructura de costos al doble que las líneas de bajo costo como Viva Aerobus y Volaris. Esto no le ha permitido competir eficientemente en el mercado nacional”, señaló René Armas Maes, consultor especialista de la industria aérea.
“Los procesos de entrada en Capítulo 11 permiten a las aerolíneas renegociar todos sus contratos laborales, así como reducir la deuda financiera, la cual ha aumentado más del 60% en comparación con 2018. También permite desacelerar la inversión en activos que no sean primordiales del negocio” añadió Armas Maes, en entrevista con A21.
En el primer trimestre de 2020, Grupo Aeroméxico tuvo una pérdida neta consolidada de dos mil 508 millones de pesos, de acuerdo con los resultados financieros publicados de este periodo.
“El saldo en la caja al 31 de marzo de 2020, incluyendo inversiones a corto plazo, se ubicó en 13,239 millones de pesos, equivalente a 563 millones de dólares” apuntó la compañía.
Para finales de marzo, la aerolínea mexicana sintió los primeros golpes en su demanda, derivado de la llegada del covid-19 a América Latina. De acuerdo con Andrés Conesa, director general de Aeroméxico, la aerolínea trataría de quemar 50 millones de dólares mensuales durante el segundo trimestre, tras una serie de medidas de recorte de gastos y capacidad.
En lo que va de 2020, el número total de pasajeros de Aeroméxico ha caído en 47.7% como resultado de la pandemia. A nivel nacional, la aerolínea ha transportado tres millones de viajeros, mientras que a nivel internacional la cifra está en 1.45 millones de pasajeros.
“De llevarse a cabo, el proceso duraría aproximadamente dos años y esto le permitiría a la aerolínea salvaguardarse con respecto a lo que está sucediendo con la pandemia y lo difícil que es conocer cómo será la demanda en los próximos 18 a 24 meses. Recordemos que todavía no hay vacuna y seguramente tendremos segunda y terceras olas de infección. En los próximos meses, solamente cierto tipo de pasajeros volarán, como los que tengan que hacer viajes esenciales, de negocios, de emergencia, o visitas a amigos y familiares, pero no habrá gran turismo” apuntó Armas Maes.
“Es una forma que ayuda a reestructurar la empresa y reducir de costos más rápido y renegociar deudas con acreedores de una forma más eficiente. Permite reducir de costos más rápido y hacer un programa de pago más flexible” finalizó Armas Maes.
