La low-cost irlandesa fue multada por la Autoridad Garante de la Competencia del Mercado (AGCM) de Italia con 1.85 millones de euros por las cancelaciones de vuelos que realizó en septiembre de 2017.
El organismo italiano consideró que Ryanair hizo una práctica desleal al cancelar estos vuelos por motivos organizativos y de gestión, lo que hace a la aerolínea merecedora de la multa.
Cancellazione massiva voli settembre e ottobre 2017, sanzione da 1.850.000 euro a #Ryanair con importo ridotto per il comportamento proattivo nell’informare correttamente i consumatori https://t.co/MohffsibKn pic.twitter.com/QbJYco1eNF
— Autorità Antitrust (@antitrust_it) 7 de junio de 2018
Si las cancelaciones hubiesen sido externas e imprevistas, la AGCM no habría multado a la compañía, pero dado que no fue así, el organismo considera que causó “inconvenientes considerables a los consumidores que planearon sus viajes durante mucho tiempo y ya habían reservado y pagado su boleto de avión”.
Durante septiembre del 2017, la low-cost canceló alrededor de dos mil vuelos, en una media de entre 40 y 50 diarios, informando como justificación que lo hacía “para mejorar la puntualidad”.
Además, la AGCM consideró que la forma en que la aerolínea informó de estas cancelaciones fue engañosa, porque ofreció el reembolso o el cambio de boleto a todos los usuarios afectados pero no informó de su derecho a compensación económica, acorde al reglamento europeo.
