El aeropuerto de Long Beach (LGB), en California, uno de los principales puntos de conexión de JetBlue en la costa oeste de los Estados Unidos, rechazó la propuesta de la aerolínea para cubrir una ruta hacia la Ciudad de México, con potencial de movilizar hasta 200 mil pasajeros por año.
A través de un aviso publicado en el expediente del Acuerdo de Cooperación Mutua Aeroméxico-Delta, JetBlue notificó al Departamento de Transporte (DOT) de EU que desea cambiar el aeropuerto de destino de LGB al Internacional de Los Ángeles (LAX), debido a que el ayuntamiento de Long Beach rechazó un proyecto para permitir el arribo de vuelos internacionales al aeropuerto de esa ciudad.
La aerolínea de bajo costo sigue en espera de respuesta positiva por parte del DOT a su solicitud de franjas de aterrizaje y despegue (slots) para volar al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). JetBlue planea ofrecer esta ruta durante la temporada de verano de 2018.
En su petición original al DOT, JetBlue ya contemplaba ambas opciones pero prefería a LGB sobre LAX con base en la zona de influencia de ambas terminales, pues de acuerdo con datos de la Encuesta de la Comunidad Estadounidense 2011-2015, casi 13 millones de personas viven a menos de 1 hora de distancia de la terminal de Long Beach, mientras que la población mexicana cercana a LGB supera en 6.6% a la que vive cerca de LAX.
“El otorgamiento de las franjas horarias permitiría a JetBlue introducir un nuevo servicio de bajo costo que conecte la cuenca de Los Ángeles y la Ciudad de México, dos de las áreas metropolitanas más grandes de Norteamérica y que cuentan con una población combinada de más de 30 millones de personas. El área de Los Ángeles también tiene una de las proporciones más altas de la población mexicana en los Estados Unidos”, afirma JetBlue en su propuesta.
