A pesar de que las emisiones de los vuelos internacionales sólo llegan a 2 por ciento de los gases de efecto invernadero, la industria aérea busca integrarse a los esfuerzos mundiales para bajar sus niveles de contaminación.
Tanto fabricantes como aerolíneas, están apoyando la propuesta de la Organización de las Naciones Unidas para limitar los contaminantes en dicho sector.
Estimaciones de especialistas, señalan que la medida podría costarles a estas empresas unos 24 mil millones de dólares anuales.
Las negociaciones que se llevarán a cabo a partir de hoy y hasta el 7 de octubre dentro de la asamblea de la Organización Internacional de Aviación Civil (ICAO), serán vitales para lograr el primer acuerdo en materia ambiental dentro del sector aéreo.
Diversos líderes del sector aeronáutico buscan que más países y empresa del sector se unan al acuerdo para lograr este apoyo para el medio ambiente.
Las emisiones del sector aéreo se omitieron en el acuerdo sobre el cambio climático de París el año pasado, porque los representantes temieron que la división de la responsabilidad de las rutas mundiales descarrilara el acuerdo general.
Aún así, la industria perfiló sus esfuerzos, ya que estimaciones de los expertos señalaron que la contaminación por emisiones del sector se triplicaría hacia 2050.
Esto significaría que cada país o región buscaría sus propias regulaciones, lo que significaría un costo mayor, por lo que abogan que exista un solo esquema global único, el cual, señalan, sería más barato y fácil que seguir un conjunto de programas locales.
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