El piloto y experto en salud aeroespacial, Carlos Salicrup, resaltó que en la aviación, la salud de los pilotos no debe ser sólo un requisito para conservar su empleo, sino ser considerado como un tema de seguridad en sí mismo.
Por ello, una de las principales preocupaciones es que los operadores aéreos no reconozcan si presentan algún malestar físico o psicológico; “Hay pilotos que no levantan la mano por miedo a perder su trabajo y muchas veces los médicos los vemos como alguien que nos dice mentiras”, explicó Salicrup en una conferencia en el Auditorio de la Escuela Militar de Enfermería el pasado 17 de noviembre.
Por ahora, se reporta que el principal problema de los tripulantes son las lesiones de columna; hernias de disco que generalmente deben ser arregladas por cirugía y terminan por limitar el movimiento, acarreando como consecuencia la cancelación de las licencias para volar.
El problema de la automatización
Además, la evolución de la tecnología incluida dentro de los aviones no es un factor que contribuya a conservar en mejor estado la salud de los individuos. Por el contrario, si no se confía en el sistema lo único que genera es estrés a los encargados del vuelo.
El doctor aeroespacial aclaró que la tecnología ayuda a disminuir la carga de trabajo, por lo que se debe monitorear que la computadora ejecute correctamente la programación indicada.
Sin embargo, “cada vez que resolvemos un problema con la automatización generamos otro”, puntualizó Salicrup. Aunque la inclusión tecnológica tenga más precisión en las operaciones y reduzca costos, a veces los pilotos no notan cuando algo anda mal en las aeronaves porque el estado de alerta del operador se relaja.
Los nuevos sistemas parecieran sobrepasar el aforo del cerebro humano con una alta capacidad de memoria. Pese a ello, no sustituyen la resiliencia de un individuo. De esta manera, Salicrup concluyó que la convivencia con la tecnología es buena aunque hay campos inexplorados en la aviación como la inteligencia artificial.
Los pilotos no son máquinas
Así como el papel del piloto es insustituible en la industria, el principal desafío es reducir la fatiga no sólo la operacional o física, establecida por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), sino la mental que bajo la visión del experto es la menos tomada en cuenta.
“En la industria nuclear, por ejemplo, están prohibidas las jornadas extras”, exclamó el médico para reclamar que en la aviación no se considera el cansancio como un factor de seguridad: 9 de 14 pilotos experimentan micro episodios de sueño y eso es un riesgo para toda la tripulación.
Actualmente, los operadores tienen tres enemigos importantes: la tecnología, las leyes y los contratos de trabajo que no toman en cuenta el descanso. Así, si ocurre una tragedia, “¿tú, investigador de accidentes, a quién le vas a echar la culpa?” preguntó Salicrup para remarcar que la responsabilidad siempre es para los pilotos y no para la infraestructura.
En conclusión, la solución establecida por el experto es dormir bien: “Una cosa es lo que mi cuerpo aguanta, otra lo que dice la ley o los contratos. Imagina que los pilotos quieran cambiar sus recesos para acoplarlos a lo que su cuerpo necesita, el costo en revisiones sería altísimo, por eso lo mejor es que se modifique la ley de manera que permita el descanso”.
El congreso Internacional de Seguridad Aérea fue clausurado por el Comandante de la Fuerza Aérea Mexicana, Carlos Antonio Rodríguez Munguía en presencia de Eduardo Chacin representante de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI); Javier Roch Soto, Coordinador General de Desarrollo Industrial, Comercial y Competitividad en el Sector Espacial en representación de la Agencia Espacial Mexicana (AEM).
También estuvieron presentes: Jorge Romero García, director general adjunto de Seguridad Aérea en representación de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC); Alberto Gonzales Aguilera, Secretario General de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) y Horacio Ornelas García, subjefe operativo de la Fuerza Aérea.
A lo largo de la semana se analizó la importancia del factor humano, el cual decide el curso de la seguridad aérea y sobre todo que ésta misma es un bien inmaterial que sólo se percibe y se le da la importancia necesaria en su ausencia.
- Inicie sesión para enviar comentarios
Facebook comments