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02/05/2024

Las estaciones espaciales privadas en la nueva carrera espacial

Fermín Romero / Jueves, 15 Febrero 2024 - 22:30

Las estaciones espaciales privadas son estructuras o instalaciones en la órbita terrestre o lunar construidas y operadas por empresas comerciales. Estas empresas pueden ser startups de tecnología espacial o compañías establecidas en la industria espacial durante los últimos veinte años. El desarrollo de estaciones espaciales privadas ha sido un avance significativo en la exploración y comercialización del espacio. 

Entre las ventajas de las estaciones espaciales privadas destacan que las empresas privadas pueden llevar a cabo investigaciones y experimentos en el espacio de manera más ágil y flexible que los programas gubernamentales, lo que impulsa la innovación en áreas como la medicina, la biología, la manufactura y la tecnología, brinda oportunidades para el desarrollo de nuevas tecnologías espaciales y ayuda a reducir el costo de la exploración espacial; pueden ofrecer servicios de transporte y alojamiento a empresas, agencias gubernamentales y astronautas privados, lo que aumenta el acceso a la órbita baja de la Tierra (LEO) para una amplia variedad de propósitos; pueden proporcionar oportunidades comerciales en áreas como el turismo espacial, la producción de bienes en microgravedad y la prestación de servicios a otras naves espaciales. Al permitir la participación de empresas comerciales en la exploración y explotación del espacio, se diversifica la economía espacial y se fomenta un ecosistema más robusto y sostenible en el espacio. Las empresas como SpaceX con su Estación Espacial Internacional Comercial (ISSC), Blue Origin con Orbital Reef, Axiom Space y Bigelow Aerospace han estado liderando el camino en el desarrollo de las estaciones espaciales privadas, con planes para construir y operar módulos adicionales en la órbita terrestre en los próximos años. Este desarrollo está cambiando fundamentalmente la forma en que concebimos y utilizamos el espacio, abriendo nuevas posibilidades para la exploración y comercialización del espacio.

Las estaciones espaciales privadas se diferencian de las estaciones espaciales tradicionales como la Estación Espacial Internacional (EEI) en los siguientes aspectos. Las estaciones espaciales privadas se financian con capital privado, mientras que las estaciones espaciales tradicionales se financian con fondos públicos de los países asociados; las empresas privadas son propietarias y operan estas estaciones espaciales, mientras que las estaciones espaciales tradicionales son y están operadas por gobiernos o agencias espaciales. Las estaciones espaciales privadas pueden tener diversos objetivos, como el turismo espacial, la investigación científica en microgravedad, el desarrollo de nuevas tecnologías espaciales o la explotación de recursos lunares.

La noción de estaciones espaciales comerciales no es nueva. Bigelow Aerospace, compañía fundada hace 25 años para desarrollar destinos orbitales, planteó la idea de una estación espacial comercial a la NASA antes de que se planeara el retiro de la EEI. En 2010 propuso conectar un módulo inflable a la EEI, su módulo de actividad expandible Bigelow (BEAM), el cual se lanzó en un cohete Falcon 9 de SpaceX y se instaló en la EEI en 2016. En 2017, propuso lanzar una pequeña estación de avanzada a la luna con el cohete Vulcan de United Launch Alliance (ULA) y aprovechar la oportunidad de desarrollar una estación de vuelo libre en el espacio con la NASA utilizando su hábitat inflable B2100 Olympus como destino comercial diseñado para tripulantes y turistas. 

No obstante, Bigelow Aerospace dejó pasar la oportunidad de ofertar por un contrato de la NASA, oportunidad que se otorgó a Axiom Space para desarrollar Axiom Hub 1 (construido por Thales Alenia Space), primer paso para desarrollar destinos comerciales en el espacio. Hoy otros proveedores comerciales tienen éxito donde Bigelow Aerospace fracasó: Nanoracks posee y opera una esclusa de aire comercial en la EEI, Sierra Space tiene su versión propia de un hábitat inflable en proceso llamado Large Integrated Flexible Environment (LIFE), componente planificado de Blue Origin en la estación Orbital Reef.

En la nueva carrera espacial (NCE) y la aventura de las estaciones espaciales comerciales, la empresa Vast Space se asoció a SpaceX para lanzar en agosto de 2025 la estación espacial comercial Haven-1, la primera en su tipo, -aunque relativamente pequeña-, está enfocada a la ciencia y la fabricación orbital a menor escala para cuatro tripulantes a bordo. Vast espera hacer solo un módulo Haven-1 en una estación de mayor tamaño. El cohete Falcon 9 llevará la plataforma a la órbita baja terrestre (LEO), con la misión de seguimiento Vast-1, utilizando la Crew Dragon para llevar a la tripulación a la Haven-1. Esta estación espacial privada iniciará su recorrido espacial sin tripulación, pero tras la llegada de la Dragon de SpaceX, con cuatro tripulantes (lugares adquiridos por agencias espaciales gubernamentales o privadas), comenzará su primera misión de 30 días, luego de que la nave se acople al módulo principal de la estación de Vast Space. El objetivo principal de Vast es que la Haven-1 sea una estación espacial multimodular con capacidad de operar en gravedad artificial de rotación, lo que le permitirá realizar el primer experimento en estas condiciones en una estación espacial comercial.

Axiom Station de Axiom space, actualmente en construcción en colaboración con la NASA y Thales Alenia Space, prevé el lanzamiento de la primera sección en 2026, para acoplarse a la EEI y, luego de ser desorbitada esta última en 2030 -tras concluir su vida útil (según la NASA)-, operará de forma independiente. La investigación y fabricación que generará Axion Station conducirá al desarrollo de múltiples industrias que utilizan técnicas sólo disponibles en microgravedad. La estación también ofrecerá servicio a las infraestructuras y soluciones en rápida expansión que operan en el espacio y proporcionará una plataforma accesible para que las empresas privadas y gobiernos continúen la investigación y desarrollo de innovaciones disruptivas. 

Starlab es la estación espacial modular de Airbus (Europa) y Voyager Space (EE.UU.) de 340 m3 (8 metros de diámetro), con un primer módulo habitable -inflable- planeado para cuatro astronautas, un brazo robótico para el servicio de carga y cargas útiles, un sistema de laboratorio de última generación para albergar una capacidad integral de investigación, ciencia y fabricación, cuyo lanzamiento de una pieza se prevé en una misión Starship de SpaceX en 2028, lo que permite ahorrar el costo y complejidad de ensamblarla en el espacio; colaboran la NASA, la ESA, hoteles Hilton, Universidad Estatal de Ohio y Northrop Grumman en sustitución de Lockheed Martin, iniciador junto con Nanoracks (se retiraron del proyecto); Northrop Grumman suministrará vuelos de reabastecimiento a la Starlab con sus naves Cygnus, como lo hace actualmente a la EEI. 

Orbital Reef es la estación espacial comercial desarrollada por Blue Origin y Sierra Space, cuyo posible lanzamiento se prevé en 2027; planean hacerla atractiva para socios comerciales, investigadores y turistas al asociarse con Boeing, Redwire Space, Genesis Engineering Solutions y la Universidad Estatal de Arizona (ASU), proporcionando múltiples opciones de transporte de carga , tripulación y la oportunidad de que los visitantes experimenten el espacio sin las limitaciones de un traje espacial. 

En el caso de las estaciones espaciales lunares como Artemis Base Camp (NASA y empresas privadas), está prevista instalarse a inicios de la década de 2030, aunque la Plataforma Orbital Lunar Gateway / Lunar Orbital Platform Gateway (LOP-G), parte fundamental del programa Artemis, tiene previsto lanzar y ensamblar sus primeros elementos -con un módulo de aterrizaje comercial- entre 2025 y 2028. A la fecha, no hay garantía de que los plazos mencionados previamente se mantengan debido a los desafíos y costos que representa construir un hábitat en órbita, ya que debe ser un orbitador seguro que mantenga cómodos a los humanos durante períodos prolongados, no solo en la duración del lanzamiento de un cohete. 

Si bien sólo Axiom Space cuenta con el acceso exclusivo concedido por NASA para construir en la EEI, al menos otras once empresas han presentados sus propuestas para desarrollar estaciones espaciales independientes de vuelo libre, de las cuales la NASA seleccionó a Blue Origin, Nanoracks y Northrop Grumman en 2021 otorgándoles recursos por $415.6 millones para el desarrollo de la Fase 1, que cubre hasta 2025. 

Posteriormente, la NASA seleccionará al menos una de las empresas para certificar que el diseño de la estación espacial sea seguro para los tripulantes de la NASA y comprar los servicios de los proveedores. Genesis Engineering Solutions contribuirá con una versión espacial de un submarino de una sola persona para realizar caminatas espaciales fuera de la estación principal, hasta ahora realizadas con trajes especiales y riesgos. Northrop Grumman, asociado con Dynetics, Leidos y otros socios anónimos, recibió $125.6 millones en financiamiento (Fase 1), para desarrollar su propia estación espacial comercial de vuelo libre en LEO, que aprovecha elementos probados en vuelo para proporcionar el módulo base (4 tripulantes inicialmente con posibilidad de expandirse a 8), para capacidades extendidas que incluyen ciencia y turismo. Rocket Lab es primera empresa privada en orbitar la Luna con el cubesat Cislunar Autonomous Positioning System Technology Operations and Navigation Experiment (CAPSTONE), en los primeros pasos hacia la construcción de la economía cislunar; el satélite estudia una órbita alrededor de la luna en la que residirá la estación espacial Gateway, desarrollada por la NASA y otras agencias espaciales. CAPSTONE intentará determinar su posición en el espacio comunicándose con el Lunar Reconnaissance Orbiter de la NASA, un satélite de imágenes lanzado en 2009. La mayoría de esas misiones giran en torno a Artemis, esfuerzo de la NASA para llevar a los astronautas a la Luna, así como realizar misiones científicas en su superficie en preparación para futuros viajes a Marte. 

Adicionalmente, en el marco de la segunda iniciativa para capacidades espaciales comerciales de la NASA /Second Collaborations for Commercial Space Capabilities Initiative (CCSC-2), la NASA anunció en junio de 2023 acuerdos no financiados de la Ley del Espacio con las empresas SpaceX, Blue Origin, Northrop Grumman, Special Aerospace Services, Think Orbital y Vast Space, para proyectos de vuelos espaciales tripulados y economía comercial de la órbita baja terrestre (LEO), con el fin de compartir experiencia técnica, evaluaciones, tecnologías y datos con las empresas involucradas. A la fecha, solo unas cuantas agencias gubernamentales han llegado a la Luna: Estados Unidos, Rusia, China, India y Japón han enviado vehículos lunares, pero ninguna empresa privada lo ha logrado, ni SpaceX.

Como puede observarse, es un hecho que la EEI tendrá varios sustitutos comerciales o privados en la LEO, además de la Tiangong china, que opera desde 2021. Las estaciones espaciales privadas están aún en una etapa temprana de desarrollo, pero tienen un gran potencial en el contexto de la NCE, entre los principales desafíos que enfrentan estos proyectos privados son el marco regulatorio en desarrollo, las preocupaciones sobre la seguridad espacial y el impacto ambiental, así como sus altos costos y riesgos.  El futuro de estas estaciones comerciales dependerá de la capacidad de superar los desafíos técnicos, económicos y regulatorios. La colaboración entre empresas privadas, gobiernos y agencias espaciales será clave para el éxito de las estaciones espaciales privadas. 

En los últimos 20 años, empresas espaciales comerciales como SpaceX, Axiom Space, Rocket Lab, Blue Origin, Cygnus, Orbital ATK, Northrop Grumman, Arianespace, se han enfocado en diversas formas de transportar personas y carga al espacio, hasta ahora esencialmente suministros, a la EEI, costosa en su operación y mantenimiento para la NASA. 

En el contexto actual, varias de estas empresas están reorientando sus intereses económicos a la creación de un mercado sólido de destinos en las estaciones espaciales comerciales en la LEO, actualmente sólo existen dos clientes la EEI y la Tinagong, pero la siguiente década esto cambiará radicalmente.  Por lo que, las estaciones comerciales representan la siguiente fase de los vuelos espaciales tripulados privados, después del turismo y las misiones lunares, hacia el desarrollo de una economía espacial y lunar sostenible, que garantice la exploración espacial pacífica, responsable y la protección del medio ambiente espacial.

 

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