El constructor aeroespacial estadounidense, Boeing, informó que suspendió todos los vuelos de su avión, 737MAX, luego de que el manufacturero de turbinas de dicha aeronave, CFM Internacional, reportó que habían aparecido deficiencias de fabricación en los motores.
En un comunicado, el manufacturero estadounidense informó que CFM “nos ha notificado de un posible escape de calidad de fabricación con discos de turbina de baja presión (LPT) en motores LEAP-1B entregados a Boeing”.
Este imprevisto llega a menos de un mes después de que el 737 MAX 9 logró el primer vuelo.
Asimismo, el fabricante agregó que están trabajando con CFM (empresa conjunta de GE Aviation y Safran Aircraft Engines) para inspeccionar los discos en cuestión. CFM y su proveedor notificaron a Boeing sobre el problema después de descubrir el problema después de una inspección de calidad.
La empresa agregó que “en ningún momento hemos experimentado una dificultad asociada con el LPT durante nuestro programa de pruebas MAX”.
Boeing reiteró que la decisión de suspender los vuelos de MAX se hizo "con mucha precaución". La interrupción se produce justo cuando Boeing se preparaba para comenzar la entrega del 737 MAX 8, los cuales fueron certificados en marzo de 2017.
A pesar de esta problemática, Boeing aclaró que las entregas de MAX 8 comenzarán este mes como estaba previsto.
Sin embargo, un portavoz de la CFM señaló que el problema potencial no se descubrió en las pruebas de vuelo o en cualquier avión fuera del campo, pero durante una inspección de calidad en la fábrica. La decisión de suspender los vuelos se hizo con cautela.
Agregó que CFM tiene dos proveedores para los LPT usados en el LEAP-1B, y el problema potencial es sólo con un LPT de un proveedor. El motor CFM LEAP-1A que también es utilizado por el Airbus A320neo no fue afectado por esta falla.
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