La Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA) realiza una serie de estudios para conocer qué tan cómodos resultan ser los vuelos en taxis aéreos (aeronaves de despegue y aterrizaje vertical, VTOL) para los pasajeros y con ello identificar qué condiciones son tolerables y cuáles no.
Esto es parte de la visión de Movilidad Aérea Avanzada (AAM) del organismo gubernamental y busca que en un futuro los cielos de Estados Unidos estén llenos de nuevos tipos de aeronaves.
Los estudios tratan de entender cómo el movimiento, la vibración y otros factores afectan la comodidad durante los trayectos en taxis aéreos, y la información obtenida será compartida con la industria y otros actores para orientar el diseño y las prácticas operativas de este tipo de aeronaves.
“Los resultados de este estudio pueden ayudar a las empresas de taxis aéreos a diseñar aeronaves que despeguen, aterricen y respondan a ráfagas de viento de manera que resulte cómoda para los pasajeros”, explicó Curt Hanson, investigador senior en controles de vuelo del proyecto.
“Los pasajeros que disfrutan su experiencia en un taxi aéreo tienen más probabilidades de repetir el viaje, lo cual ayudará al crecimiento del sector”.
El equipo de investigación ha tenido acceso al Laboratorio de Calidad del Viaje en Armstrong, el Laboratorio de Vibración Humana y el Simulador de Movimiento Vertical en el Centro de Investigación Ames de la NASA; espacios que han permitido estudiar cómo responden los pasajeros a diferentes niveles de calidad del viaje, así como evaluar la precisión y facilidad con la que los pilotos pueden controlar estas aeronaves.
Tras una fase de pruebas con pilotos, en octubre se llevó a cabo un estudio con empleados de la NASA que se ofrecieron como voluntarios para participar como pasajeros en vuelos virtuales de taxi aéreo, tras lo cual describieron su nivel de comodidad a los investigadores.
Entre los primeros resultados se reveló una relación entre los movimientos verticales bruscos y el malestar de los pasajeros, por lo que se requiere más recolección de datos para comprender cómo interactúan el movimiento, la vibración y otros factores en la experiencia del pasajero.
“En el Simulador de Movimiento Vertical podemos investigar cómo afectan las decisiones tecnológicas y de diseño a las cualidades de manejo de la aeronave, generar datos mientras los pilotos maniobran modelos de taxis aéreos en condiciones realistas, y luego usar esa información para seguir evaluando la comodidad de los pasajeros en los laboratorios de vibración y calidad del viaje”, comentó Carlos Malpica, investigador senior en dinámica de vuelo de aeronaves de rotor en el centro Ames.