La presión que tiene Airbus por los retrasos del A400M, viene directamente de diversos gobiernos europeos, empezando por Francia, que buscan tener ya en sus manos estas aeronaves prometidas.
Al parecer, problemas con un subcontratista italiano han sido la causa principal del retraso que ha tenido Airbus con sus clientes, con el mayor proyecto de defensa europeo en los últimos tiempos.
Entre las acusaciones que enfrenta el fabricante de aviones, son reclamaciones de indemnizaciones y compensaciones.
En principio, el gobierno francés, dirigió un escrito a Airbus presionando para que la compañía diga si los problemas con las cajas de cambio de fabricación italiana y otras amenazas a la eficacia militar del A400M se van a resolverse este año.
Existen tres dificultades que tiene este modelo: defectos en la caja de cambios que requieren que los aviones sean revisados cada 20 horas de vuelo, sistemas defensivos incompletos y limitaciones en ciertos tipos de operaciones con paracaídas.
Ante esta problemática, Airbus no ha podido clarificar la resolución de estos obstáculos por ahora y tampoco en el plazo requerido, que es a finales de este año.
Airbus indicó que hay siete países de la OTAN, que han hecho pedidos del A400M: Bélgica, Reino Unido, Francia, Luxemburgo, España y Turquía.
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