Se acusa a la aerolínea de “disciplinar” ilegalmente a sus colaboradores y de manifestar una animosidad antisindical
Southwest Airlines enfrentará una demanda por intimidar y disciplinar ilegalmente a los pilotos que participan en su sindicato, dictaminó un tribunal federal de apelaciones.
En una decisión de 3-0, el Tribunal de Apelaciones del 5.º Circuito de EU señaló que la Asociación de Pilotos de Southwest Airlines, con más de 9,000 miembros, alegó lo suficiente que la aerolínea con sede en Dallas tenía "animosidad antisindical" para permitir que la disputa procediera en un tribunal federal.
Un juez de un tribunal inferior había dictaminado que la disputa era menor y, por lo tanto, debía resolverse en arbitraje.
El caso surgió de la decisión de Southwest de despojar a Timothy Roebling de sus responsabilidades y pagarle como "piloto de control", un grupo especial de unos 300 pilotos que trabajan en estrecha colaboración con la gerencia y capacitan a otros pilotos.
Southwest citó ostensiblemente el uso de una vulgaridad por parte de Roebling para justificar la sanción, pero el sindicato dijo que se debió a su decisión de unirse al comité de pilotos verificadores del sindicato.
Al escribir para el panel de la corte de apelaciones con sede en Nueva Orleans, la jueza principal Jennifer Walker Elrod estuvo de acuerdo con el juez de la corte inferior en que la disputa era un asunto menor según la Ley Federal de Trabajo Ferroviario.
Pero dijo que las acusaciones de que Southwest hizo que los pilotos verificadores temieran represalias por asociarse con el sindicato, y que el jefe de Roebling amenazó con despojarlo de sus calificaciones, hicieron que este caso fuera diferente.
“Este tipo de acusaciones apoyan suficientemente la afirmación del sindicato de que Southwest tenía la intención de 'debilitar' o 'destruir' la capacidad operativa del sindicato", escribió.
Southwest señaló en una declaración que no estaba de acuerdo con la decisión del tribunal y negó vehementemente las acusaciones del sindicato.
El tribunal de apelaciones devolvió el caso a la jueza de distrito de EU Barbara Lynn en el tribunal federal de Dallas, quien lo había desestimado en septiembre de 2023.
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