Fermín Romero*
Con esta primera entrega inicia esta columna, cuyo propósito es abonar al conocimiento y difusión de la gran cantidad de aristas relacionadas con la agenda espacial global, y el mes de octubre nos ofrece la oportunidad de abordar este tema.
La Semana Mundial del Espacio (SME) es una celebración anual de la comunidad espacial global. Sus orígenes se remontan a la resolución A/RES/54/68 Semana Mundial del Espacio, del 6 de diciembre de 1999, de la Asamblea General de las Naciones Unidas, impulsada por la Comisión de las Naciones Unidas sobre la Utilización del Espacio con Fines Pacíficos (COPUOS), que depende de la Oficina de las Naciones Unidas para los Asuntos del Espacio Ultraterrestre (UN OOSA). La fecha de la SME quedó establecida por dicha resolución entre el 4 y el 10 de octubre, con el objetivo de celebrar cada año en todo el mundo las contribuciones de la ciencia y la tecnología espaciales al mejoramiento de la calidad de vida humana.
La fecha fue seleccionada por los siguientes motivos, el 4 de octubre de 1957 se lanzó al espacio el Sputnik, primer satélite artificial de la Tierra, que dio inicio a la exploración espacial, así como el 10 de octubre de 1967 entró en vigor el Tratado sobre el Espacio Ultraterrestre (Carta Magna del Espacio).
Uno de los objetivos de la SME es fortalecer a los profesionales del espacio del mañana, inspirando a los estudiantes; destacar el apoyo hacia los programas espaciales; educar al público en general sobre las actividades espaciales y sus beneficios para la sociedad; fomentar la cooperación internacional en la divulgación y la educación sobre la agenda del espacio. Lo cual, sin duda, se está cumpliendo a cabalidad.
La primera ocasión que México participó en la SME fue en 2009 y, desde entonces, cada vez se registra una creciente y activa participación de diversos actores en el ámbito nacional. El pasado 17 de septiembre tuve la oportunidad de charlar en mi programa sabatino Café Espacial Series, que se transmite vía TV satelital y plataformas digitales, con Armengol Torres, vicepresidente de la World Space Week Association (WSWA) y el ingeniero Mario Arreola Santander, quien además de colaborar en la Agencia Espacial Mexicana (AEM), funge como coordinador nacional de la SME, apoyando a la WSWA en esta importante celebración.
Es importante destacar que, cada año, un comité asesor de la WSWA selecciona un eje temático, que orienta las actividades que organizan gobiernos, empresas, instituciones educativas, sociedad civil y expertos. Este año, por ejemplo, el tema es “Espacio y sostenibilidad”, de gran importancia para concientizar a la humanidad sobre la sostenibilidad a largo plazo de los recursos del planeta, así como de las actividades en el espacio ultraterrestre. En 2021, el tema fue La mujer en el espacio, y en 2023 el tema será Espacio y emprendedores.
En la Tierra, la Agenda 2030 de las Naciones Unidas impulsa los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en la búsqueda de soluciones a los grandes retos que enfrenta la humanidad en el planeta, incluido el cambio climático y sus efectos (a través de satélites de observación de la Tierra) y fuera del planeta, la saturación de las órbitas bajas con “desechos espaciales” (un problema subestimado), que incluyen satélites fuera de uso y fragmentos de estos derivados de colisiones -causadas deliberadamente por las potencias espaciales para demostrar sus capacidades, y no previstas- (algunos cálculos sugieren que además de los desechos identificados y monitoreados constantemente por las agencias espaciales (space traffic management system), existen más de 130 millones de objetos de menos de 1 milímetro orbitando a aproximadamente 28 mil kilómetros por hora), que amenazan a satélites operativos, a la estación espacial internacional (EEI) y el lanzamiento de operaciones futuras al espacio.
Esto último, ante la posibilidad del Síndrome Kessler, un riesgo latente derivado de la gran cantidad de desechos que podría producir una reacción en cadena provocada por un posible choque entre la basura espacial existente, lo que produciría muchas más colisiones y en consecuencia más basura espacial, inutilizando satélites operativos y poniendo en riesgo el envío de misiones al espacio. Asunto sobre el cual la comunidad científica ha alertado desde hace tiempo y que, en subsecuentes entregas, estaremos aportando información detallada para su comprensión y análisis. Sin duda, la sostenibilidad es un tema fundamental para comprender la actividad del ser humano en el espacio.
*En A21 le damos una cordial bienvenida a Fermín Romero, Presidente de la FAU, director y conductor de Café Espacial Series, director del Punto Nacional de Contacto RELACA- Espacio, Fundador y Director del Consorcio Espacial Latinoaméricano, integrante del Consejo Directivo de la Sociedad Mexicana de Ciencia y Tecnología Aeroespacial (SOMECyTA), miembro asociado del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI), presidente de relaciones interinstitucionales con Centro y Sudamérica del Unity of Nations for Climate Chance Action Council (UNAccc) y presidente de Mil Mentes por México Internacional capitulo Ciudad de México.
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