Pasar al contenido principal
19/11/2024

Aeroméxico-Delta, ¿qué sigue?

Francisco M. M… / Jueves, 24 Noviembre 2016 - 08:18

No es una noticia nueva, todos sabemos que desde siempre Mexico ha dependido de los movimientos e intereses políticos y económicos de los Estados Unidos de América. Esto es algo que a través de nuestra historia, si bien nos ha traído beneficios, también ha afectado el desarrollo de nuestro país y, desde luego, la industria aérea no ha sido una excepción.

Los primeros pasos para lograr una alianza comercial entre nuestra aerolínea de bandera, Aeroméxico, y la norteamericana Delta se dieron hace muchos años, al inicio del grupo Sky Team, y ha ido evolucionando poco a poco.

Ha sido a partir de los últimos tiempos cuando se ha buscado que esta alianza se convierta en algo tan importante y definitivo como se pretende ahora, lo que daría un importante control accionario de Delta sobre Aeroméxico y a nuestra aerolínea grandes oportunidades de desarrollo económico, crecimiento en flota y rutas, entre otros beneficios.

Desde luego que está negociación, de por sí tan complicada, ha debido superar muchos obstáculos, el último y muy importante es el que se refiere a la restricción (castigo diría yo) de slots que las autoridades de Estados Unidos quieren imponer a las aerolineas para autorizar su alianza, en los términos en que se proponen.

Da la impresión que la administración de ambas aerolíneas no midieron muy bien los tiempos, pues se vieron involucradas en medio de la aprobación de un convenio aéreo bilateral y una campaña presidencial, dejando llegar las elecciones y la increíble victoria de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, con todas sus posibles e impredecibles consecuencias hacia el interior de su país y por supuesto hacia el exterior, antes de concretar el acuerdo, lo que sin duda vino a poner mayores dudas y expectación sobre el asunto.

Como sea, más obstáculos se veían venir ante el tamaño de la operación que se pretende entre las líneas aéreas y la enorme presión que otras mega empresas norteamericanas seguramente deben estar ejerciendo sobre su gobierno, que desean fervientemente seguir teniendo el gran tamaño del pastel del que ahora disfrutan, esto sin contar con la política proteccionista (¿más?) que propone Trump.

Andrés Conesa, director general de Aeroméxico, ya dejó claro que no está de acuerdo en ceder ante las autoritarias e injustas condiciones que el gobierno de Estados Unidos quiere imponer, y creo que hace lo correcto, por todo lo que hay en juego para su aerolínea y para la industria aérea de nuestro país; por otra parte, Delta esta urgiendo al gobierno de Estados Unidos a reconsiderar su posición.

Aeroméxico se ha convertido en una aerolínea de éxito, es ya muy importante a nivel internacional y quizá sería el momento de aprovechar las oportunidades que esta crisis, provocada por las autoridades americanas, puede traer para ella.

Desde el punto de vista comercial, ¿a quien le tienen pánico las aerolíneas de Estados Unidos?

La respuesta es sencilla, le temen a la gigantesca competencia que representan las aerolíneas del otro lado del mundo, empezando con Qatar, Emirates, Etihad, Singapore, Turkish y Cathay, que con consideradas como las mejores a nivel mundial.

Quizá los empresarios mexicanos y sus administradores deberían tener una visión diferente (mucho más allá del muro que pretende construir Trump) para virar 180 grados y mirar hacia otras empresas del mundo, no sólo en tratados comerciales y frágiles códigos compartidos, sino a manera de alianzas más serias como la pretendida con Delta.

Seguramente alguna de las empresas a que me he referido y otras más estarían felices de tener acceso a esa posibilidad.

No quiero pecar de simplista y pensar que pueda ser fácil llevar adelante este tipo de negociaciones y alianzas, pero mucho del camino ya está andado y las oportunidades están ahí.

Dejando a un lado la inútil arrogancia, considero que Aeroméxico se ha ganado su lugar entre las aerolíneas del mundo, como para ser considerada un magnífico y productivo socio; por otra parte, quizá ya va siendo hora de que los vecinos del norte empiecen a verla con más respeto.

Me pregunto, ¿qué pasaría si el gobierno de Estados Unidos sigue poniendo obstáculos a la alianza Aeromexico-Delta y nuestra aerolínea bandera diera marcha atrás a la negociación, se fuera con todo a buscar alianzas comerciales profundas y no sólo códigos compartidos con las grandes aerolíneas europeas y asiaticas, especialmente con las que ya he nombrado?

Pues, seguramente los norteamericanos entrarían en pánico y empezarían a cambiar su manera de actuar, si al final no lo hacen, ellos perderían mucho. En cuanto a Aeromexico, vería su horizonte mucho más amplio y con otras grandes posibilidades; como ejemplo ahí está el acuerdo de Qatar con LATAM.

Ya lo dijo alguna vez Conesa y no sé porque razón se abandonó aquel, que no sólo era un sensacional slogan publicitario de Aeroméxico hace algunos años, sino una digna, orgullosa y motivante actitud para todos:

Tenemos que hacer que los que nos quieran ver tengan que mirar hacia arriba" .

Por cierto, muchos ya lo hacen...¿entonces?

Facebook comments