El Aeropuerto de Schiphol anunció la instalación de dispositivos de ayuda de elevación en las 385 estaciones de trabajo de las salas de equipaje, reduciendo el esfuerzo físico y contribuyendo a un entorno laboral más saludable.
Indicó que la terminal se posiciona como líder mundial al ofrecer esta tecnología a sus empleados en tal escala. Además, ha puesto en marcha varias pruebas para avanzar hacia la mecanización total del manejo de equipaje con el fin de seguir desarrollando sus instalaciones.
“Esto aligera el trabajo de los empleados de equipaje. Es una mejora significativa. Probamos, adquirimos e instalamos las ayudas de elevación en rápida sucesión, mientras continuaba el proceso regular de manejo de equipaje. Hicimos todo lo posible para lograrlo junto con las seis empresas de asistencia en tierra: Aviapartner, dnata, KLM, Menzies, Swissport y Viggo. Estamos orgullosos de poder ofrecer esto a los empleados, porque un entorno de trabajo seguro, adecuado y agradable es nuestra principal prioridad”, afirmó Esmé Valk, directora de Personas y Transformación en Royal Schiphol Group.
Con estas ayudas de elevación, Schiphol y las empresas de asistencia en tierra están cumpliendo con los requisitos establecidos por la Autoridad Laboral de los Países Bajos.
Actualmente se utilizan diversos tipos de dispositivos en Schiphol, todos probados exhaustivamente por los propios empleados. El aeropuerto y los operadores fomentan activamente su uso mediante campañas informativas, con el objetivo de que esta nueva forma de trabajar se convierta en práctica habitual.
Para poder instalar una ayuda de elevación funcional en cada estación de trabajo, Schiphol y las empresas colaboraron con los proveedores en el desarrollo de esta tecnología, ya que aún no existía una solución adaptada.
Los últimos dos años se dedicaron a realizar pruebas con empleados, además de implementar ajustes relacionados con el uso, la seguridad y la velocidad. También se modificaron aspectos estructurales de las salas de equipaje, como la reubicación de andenes y la modificación de barandillas. Todo esto ocurrió sin interrumpir el manejo normal del equipaje.
A pesar de que las ayudas de elevación ya están ampliamente disponibles y se incentiva su uso, Schiphol continúa trabajando en el desarrollo de las salas de equipaje del futuro, en conjunto con quienes laboran en ellas.
La tecnología que permite cargar y descargar maletas mediante máquinas aún está en una etapa incipiente a nivel global. Para ello, Schiphol colabora con los aeropuertos de Bruselas, Incheon, Londres-Heathrow y Oslo en el desarrollo de estas soluciones.
Actualmente, se llevan a cabo varias pruebas en las salas de equipaje de Schiphol. Desde hace más de seis meses, un nuevo tipo de robot carga de forma autónoma el equipaje que parte desde Schiphol en carritos y contenedores con destino a las aeronaves. Y desde junio, otra innovación tecnológica avanzada descarga automáticamente parte del equipaje que llega diariamente en contenedores.
“Los empleados se encargarán de abrir e inspeccionar los contenedores, pero ya no necesitan levantar las maletas ellos mismos”, afirmó Valk.
En los próximos años, Schiphol también tiene previsto colaborar con proveedores para desarrollar nuevos tipos de contenedores de equipaje y otros robots diseñados específicamente para operar en estas salas.