La inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en marzo del próximo año no soluciona la saturación aérea en el Valle de México, puesto que la puesta en operaciones del aeródromo representa solo una parte del Sistema Aeropuerto Metropolitano (SAM), que en teoría remediaría la situación, y éste todavía no se encuentra listo, señaló el abogado especialista Pablo Casas Lías.
Asimismo, señaló que Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) han llevado a cabo un “desdiseño del espacio aéreo mexicano”, que derivará en que la Ciudad de México mantenga la saturación en el espacio aéreo de la capital durante un sexenio más.
“Es decir, lo que debe estar listo para marzo del 2022 es ese sistema aeroportuario metropolitano, no un aeródromo, ya que, de otra manera, no se soluciona la saturación del espacio aéreo mexicano”.
De acuerdo con Casas Lías, el Sistema no funcionará debido a la cancelación de la construcción de la Terminal 3 en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y de la compra, por parte del gobierno, del porcentaje accionario en poder de particulares del Aeropuerto de Toluca, además de que y a fallos en el rediseño del espacio aéreo en el Valle de México.
“El AIFA, per se, no sustituye al cancelado aeropuerto de Texcoco. Lo que lo pretende sustituir es una tríada de aeropuertos que conforman, según el Plan Nacional de Desarrollo, el Sistema Aeroportuario Metropolitano (también llamado Sistema Aeroportuario Mexicano en los últimos comunicados de la SCT). Este sistema, a la fecha, se encuentra fallido”, aseguró.
La misma SCT ha señalado que el AIFA carece aún de la tecnología requerida en los estándares de la Organización de Aviación Civil Internacional para llevar a cabo procedimientos de llegada y salida con navegación satelital, indicó el especialista, basándose en un reciente comunicado emitido por la Secretaría en donde valida la operación conjunta del SAM.
En este comunicado, la SCT dio a conocer que habrá una “futura modernización tecnológica programada para el mejoramiento en la aeronavegabilidad y la introducción de procedimientos de llegada y salida con navegación satelital”, resaltó Casas Lías.
Asimismo, señaló que se evidenciará la inviabilidad del proyecto cuando Seneam y la SCT migren del diseño computarizado a la operación real de todas las trayectorias de llegada y salida en el Sistema Aeroportuario, debido a que el Estado no tomó en cuenta su obligación de migrar a procedimientos de llegada y salida con navegación satelital y que es necesaria para cumplir con los niveles internacionales de seguridad operacional.
Casas Lías prevé que en el AIFA se utilicen dos pistas destinadas a la aviación civil de las cuatro que tendrá. Una será para vuelos domésticos, otra para vuelos internacionales, y las dos restantes serían utilizadas exclusivamente para uso militar.
A esto se añade el problema de la presencia del Cerro de Paula, localizado a no más de 12 kilómetros del AIFA, y cuya elevación máxima es de dos mil 625 metros sobre el nivel del mar.
“En esas circunstancias, la base militar sigue siendo eso, una renovada base militar que no cuenta, material y físicamente, con la infraestructura, equipamiento y pistas necesarias, para ser certificada legalmente como aeropuerto internacional”, finalizó el abogado.
