La Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) de Brasil publicó una ordenanza en la que se implementó una malla aérea reducida, que tiene por objetivo mantener la conectividad aérea del país debido a la pandemia COVID-19.
Esta distribución se adecúa a las preocupaciones del gobierno brasileño para mantener una red que integre la región, con ajustes para que ningún estado quede sin al menos una conexión.
De tal modo, ANAC completó el plan con la red aérea con operaciones programadas de GOL Linhas Aereas, Azul y LATAM hasta finales de abril; el total de vuelos serán mil 241: 723 en el sureste, 153 en la región noreste, 155 en el sur, 135 en el medio oeste y 75 en la zona norte.
En total, LATAM operará 483 vuelos, Azul 405 y GOL 353.
“La aviación de varios países se está parando por completo. Lo que estamos haciendo en Brasil es porque sabemos que el servicio aéreo es esencial para ayudar al país a superar este escenario sin precedentes, permitiendo el desplazamiento de materiales, profesionales de la salud y personas que aún necesitan viajar”, señaló el CEO de la Agencia, Juliano Noman.
Esta red de emergencia es 91.61% mas pequeña que la prevista original por los transportistas; entre GOL, Azul y LATAM, la caída de sus servicios es del 56.06% de los destinos atendidos, pasando de 106 a 46.
El número de operaciones semanales pasó de 14 mil 781 a mil 241.
De igual modo, ANAC permitirá que cualquier compañía de taxi aéreo se convierta en transporte de carga, sin la necesidad de consentimiento previo durante 180 días; no obstante prohíbe el traslado de pasajeros junto con la carga.
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