
Durante la conferencia Airports Innovate 2025 organizada por el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI) en Busan, República de Corea, ACI Europa renovó su llamado a un cambio de enfoque en la gestión de capacidad y rendimiento en los aeropuertos europeos, colocando al pasajero como eje central de esta visión.
El organismo regional afirmó que una gestión efectiva del rendimiento requiere que los aeropuertos tengan una visión operativa clara, especialmente en cuanto al cumplimiento de los horarios a través de procesos de atención en tierra. Esto permite tomar acciones dirigidas en colaboración con los prestadores de servicios en tierra, aerolíneas, proveedores de servicios de navegación aérea y el Gestor de Red.
El desempeño de un aeropuerto está influenciado por múltiples factores, con aportaciones de diversos actores. En la carrera por alcanzar un alto rendimiento operativo, los aeropuertos actúan como participantes, árbitros y también como el lugar donde empieza y termina la operación.
Para apoyar este cambio de paradigma, ACI Europa presentó dos publicaciones estratégicas: Documento de Posicionamiento sobre el Desempeño Aeroportuario y la Guía del Plan de Operaciones Aeroportuarias (AOP).
El primero describe cómo los aeropuertos pueden liderar la transición de una gestión reactiva a una predictiva del rendimiento. Además hace énfasis en la necesidad de pasar de medir resultados a gestionar insumos. Cambiar indicadores reactivos como los retrasos por factores adelantados —como la asignación de puertas, preparación de activos, planificación de recursos y confiabilidad de procesos— permitirá alcanzar mayores niveles de eficiencia y previsibilidad. Esto se traduce en llegadas puntuales, procesos de atención confiables y mejor aprovechamiento de la capacidad existente.
Por su parte el AOP es un marco práctico para lograr excelencia operativa mediante la colaboración y el uso de datos en tiempo real.
Esta guía ofrece una hoja de ruta para establecer un plan operativo único y consensuado que integre las operaciones aire-tierra, promoviendo conciencia situacional compartida entre todos los actores. El AOP se estructura en torno a cuatro servicios interconectados: Orientar, Monitorear, Gestionar y Analizar Postoperaciones.
Al alinear estos servicios con indicadores clave de rendimiento y herramientas de balance demanda-capacidad, el AOP permite anticipar y mitigar disrupciones, gestionar la complejidad y fortalecer la resiliencia.
Este enfoque ayuda a los aeropuertos a recuperarse rápidamente de eventos como condiciones meteorológicas extremas, huelgas o fallos de sistema, manteniendo al mismo tiempo un servicio óptimo para pasajeros y partes interesadas.
De forma crucial, el AOP se integra dentro de la transformación digital del sistema de gestión del tránsito aéreo en Europa, bajo el reglamento del SESAR Common Project 1, asegurando interoperabilidad con el Plan de Operaciones de Red (NOP) gestionado por Eurocontrol. Estos sistemas, al trabajar de forma conjunta, permiten que los datos operativos locales informen la toma de decisiones a nivel de red, reduciendo retrasos, optimizando flujos y mejorando la previsibilidad del transporte aéreo en todo el continente.
Tanto el Documento de Posicionamiento como la Guía AOP dejan claro que alcanzar la excelencia operativa depende de acciones colaborativas y coordinadas en todo el ecosistema de la aviación. Los aeropuertos deben asumir el liderazgo, no reemplazando funciones ajenas, sino convocando a todos los actores clave a trabajar en conjunto.
ACI Europa hizo un llamado a aerolíneas, operadores de tierra, proveedores de servicios de navegación aérea (ANSP), coordinadores de slots y reguladores para que alineen sus esfuerzos con estos marcos de rendimiento liderados por los aeropuertos. Una cooperación predecible y basada en datos, como la integración del AOP con el NOP, es esencial para alcanzar una red verdaderamente resiliente y sostenible.
“Dirigir un aeropuerto se parece demasiado a gestionar una fábrica en la que has invertido, sin poder realmente controlar su rendimiento ni su productividad. Eso debe cambiar. Las limitaciones en Europa para desarrollar capacidad física, junto con la exigencia de sostenibilidad y un aumento en las disrupciones —incluidas amenazas híbridas— solo significan una cosa: que los aeropuertos deben ser reconocidos y empoderados para convertirse en los verdaderos gestores de su capacidad y desempeño”, afirmó Olivier Jankovec, director general de ACI Europa.
“Esto también implica revisar las reglas europeas sobre asignación de slots, para garantizar más transparencia, eficiencia y preservar la integridad y competitividad del mercado aéreo”, añadió.
ACI Europa sostiene que esta evolución no es opcional, sino un imperativo estratégico, impulsado por el objetivo de llevar a los pasajeros a su destino a tiempo. La gestión del rendimiento ya no debe entenderse como un ejercicio retrospectivo de reporte, sino como una disciplina proactiva basada en datos, que posicione a los aeropuertos como los verdaderos gestores de su operación, orquestando el ecosistema hacia metas comunes de eficiencia, seguridad y sostenibilidad.






