
LanzaJet anunció que puso en funcionamiento su planta Freedom Pines Fuels, ubicada en Estados Unidos, la primera a nivel mundial con producción de combustible para aviación derivado de etanol a escala comercial.
Este logro de la productora marca la primera solución renovable no basada en petróleo compatible con las aeronaves actuales y viene precedido de 15 años de investigación, colaboración, inversión y escalamiento.
“Hoy demostramos lo que ocurre cuando se combinan innovación, resiliencia, ingenio y trabajo en equipo para pensar en grande, crear una nueva industria, superar desafíos y habilitar un crecimiento global”, dijo Jimmy Samartzis, CEO de LanzaJet.
La tecnología de la empresa puede trabajar con materias primas sostenibles como residuos agrícolas, cultivos energéticos, residuos sólidos urbanos y carbono capturado, además de ofrecer reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero en ciclo de vida comparadas con el combustible convencional para aviación.
“Una vez mezclado con Jet A-1, el resultado es un combustible totalmente certificado y compatible con aeronaves e infraestructura existentes. La empresa está implementando esta tecnología en Estados Unidos, Australia, Japón, India, Reino Unido, Colombia, la Unión Europea, Medio Oriente y Kazajistán”, agregó.
La planta se ubica en Soperton, Georgia y contó con una inversión de más de 300 millones de dólares (mdd), empleó a más de 300 personas durante su construcción y ha generado más de 65 empleos directos e indirectos en su operación actual.







